Las enfermedades infecciosas fueron la principal causa de fallecimientos en Castilla-La Mancha en 2020, un grupo en el que se incluye el covid-19. En este sentido, este fue el motivo en el 25,35% de los casos.
Por su parte, las enfermedades circulatorias fueron la causa en un 21,32% de las muertes, mientras los tumores registraron un 18,20%. Las enfermedades respiratorias fueron causa en el 9,50%, mientras las del sistema nervioso lo fueron en el 4,20%. Por último, enfermedades digestivas y mentales fueron las causas en el 4,18% y el 3,64% de los fallecimientos, respectivamente.
Resto de España
Las enfermedades del sistema circulatorio fueron, en 2020, la principal causa de los fallecimientos en 11 de las 17 comunidades y en las dos ciudades autónomas, mientras que en otros seis territorios fueron los tumores y en dos las enfermedades infecciosas.
Así, la estadística de defunciones, publicada esta semana por el INE, referida al pasado año, revela que las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de muerte en Galicia (donde fueron achacables a ellas el 28,95 % de las muertes), Andalucía (28,69 %), Ceuta (28,40 %), Murcia (28,04 %), Comunidad Valenciana (26,27 %), Melilla (25,91 %), Asturias (25,85 %), Extremadura (25,46 %), Aragón (24,74 %), La Rioja (23,86 %) y Castilla y León (22,83 %).
En otras seis comunidades la primera causa fueron los tumores: Canarias (27,99 %), Baleares (26,88 %), Cantabria (25,70 %), País Vasco (25,66 %), Navarra (23,85 %) y Cataluña (21,62 %); y, debido a la covid-19, en 2020 las enfermedades infecciosas y parasitarias fueron la primera causa de fallecimiento en Madrid (responsable del 30,17 % de los casos) y Castilla-La Mancha (25,35 %).
Diferencias por territorio
En el caso de las defunciones como consecuencia de trastornos mentales y del comportamiento (desde los de carácter orgánico, senil y presenil a los debidos al consumo de alcohol o drogas), la incidencia en 2020 se concentró en las comunidades del norte del país, con unas tasas muy superiores a las de sur.
Así, estos trastornos fueron responsables del 7,40 % de las muertes en Galicia, el 7,31 % en Cantabria y País Vasco, el 5,59 % en Asturias y el 5,22 % en la Rioja, mientras que solo estuvieron detrás del 1,83 % de los fallecimientos en Melilla; el 2,01 % en Ceuta, y el 3,12 % en Andalucía.
En el sur, por el contrario, se encuentran las comunidades que encabezaron en 2020 la mortalidad por enfermedades del sistema digestivo (úlcera de estómago o duodeno, enteritis y colitis no infecciosas, enfermedad vascular intestinal o cirrosis): Melilla, donde fueron responsables del 6,31 % de las muertes; Ceuta, el 5,40 %; Canarias, el 5,17 %, y Andalucía, el 5,06 %, frente a las que registran menor incidencia: Cataluña (3,87 %), Madrid (3,90 %) y Cantabria (4,02 %).
Por otra parte, en 2020, debido a la incidencia de la covid-19, se produjo una gran diferencia entre unos territorios y otros en mortalidad por enfermedades infecciosas y parasitarias (covid-19, tuberculosis, enfermedad meningocócica, septicmia, hepatitis vírica o sida).
En concreto, Madrid estuvo a la cabeza con un 30,17 % de las muertes achacables a este grupo de enfermedades, junto a Castilla-La Mancha (25,35 %) y Castilla y León (22,05 %); frente a Canarias, solo un 4,45 %, o Galicia (6,02 %) y Murcia (7,53 %).
Más causas
Sin ningún patrón geográfico aparente, pero también con importantes diferencias entre territorios, dibujan los datos del INE los mapas de las dos principales causas de defunción: las enfermedades del sistema circulatorio (como la hipertensión, el infarto o la insuficiencia cardíaca) y los tumores.
Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la causa del 28,95 % de las muertes en Galicia; el 28,69 % en Andalucía, y el 28,40 % en Ceuta, y en cambio del 18,66 % en Madrid; el 21,32 % en Castilla-La Mancha, y el 21,39 % en Navarra.
Por su parte, los tumores fueron responsables del 27,99 % de los fallecimientos en Canarias; el 26,88 % en Baleares, y el 25,83 % en Galicia, en tanto que en Castilla-La Mancha lo fueron del 18,20 %; en Madrid del 19,57 %, y en Castilla y León del 20,96 %, aunque en este y otros casos tiene mucho que ver la influencia en los datos de la aparición este año de la covid-19.
Tampoco hay un patrón geográfico evidente en la mortalidad por enfermedades del sistema nervioso y de los órganos de los sentidos (meningitis y Alzheimer sobre todo), con Murcia a la cabeza (donde suponen el 8,19 % de las defunciones), seguida de Navarra (7,70 %) y la Comunidad Valenciana (7,33 %), frente a Castilla-La Mancha (4,20 %), Canarias (4,57 %) y Asturias y Madrid (4,60 % en ambos casos).