Conseguir una alimentación saludable y a la vez accesible a todos los bolsillos se ha vuelto prácticamente una misión imposible debido a la ingente subida de precios que están sufriendo los consumidores desde hace meses por la crisis energética y los problemas en el transporte y el suministro. Sin embargo, se pueden elaborar comidas sanas y nutritivas con multitud de ingredientes económicos que permiten reducir la factura en el supermercado.
La falta de tiempo y las apreturas económicas llevan a la población, en muchas ocasiones, a consumir alimentos procesados ricos en sales, azúcares y grasas, más asequibles que los frescos aunque con menos nutrientes y perjudiciales para la salud en caso de abusar de ellos. Pero, según defienden los nutricionistas, existen alternativas para alimentarse con una cantidad adecuada de proteínas y vitaminas sin tener que preocuparse en exceso por el coste de los alimentos.
¿Se puede entonces comer sano y barato? Ana María Sánchez, nutricionista en la clínica Atlas de Albacete, asegura que es posible seguir una dieta equilibrada a la par que económica y ofrece cinco consejos para conseguirlo.
1. Promover el consumo de proteína vegetal
La profesional incide en el consumo de vegetales, ya que actualmente se come demasiada proteína animal. "La proteína vegetal es más barata y es igual de nutritiva que la carne. Por eso, recomendamos tomar legumbres tres veces a la semana", explica.
2. Evitar las comidas exóticas
"Debemos evitar las comidas exóticas que procedan de otros países porque son productos más caros", puntualiza. Además, pretende concienciar a la población para que no consuma platos elaborados, ya que esto encarece la compra, además de crear más residuos y perjudicar el medioambiente.
3. Apuesta por la congelación de los alimentos
La dietista albaceteña también aconseja adquirir los productos cuando estén a bajo precio y congelarlos para poder tomarlos cuando se desee. "Si hacemos una buena congelación, no tendremos pérdidas de nutrientes y cuando consumamos no notaremos la diferencia",explica.
4. Tener una buena planificación
Cuando se va a realizar la compra es importante hacer una previsión de los ingredientes que se necesitan en función del dinero del que se dispone. Por eso, la planificación es fundamental para ahorrar y evitar tirar comida a la basura.
"Es necesario crear un menú diario de lunes a viernes para alejarse de la improvisación y de los alimentos procesados. Así, se dispondrá de tiempo suficiente para comparar los distintos alimentos en cuanto a sus ingredientes, ofertas y precios que tienen en los supermercados", señala. En este último punto, la nutricionista albaceteña incide en comprar solo la cantidad que se necesite y no llenar la cesta de productos innecesarios.
5. El agua la mejor opción
La hidratación es un pilar fundamental en nuestra dieta. En ese sentido, Sánchez asegura que siempre la mejor elección para beber durante la comida es el agua, debido a que otras bebidas como zumos, refrescos o la cerveza son totalmente prenscindibles. "No hay nada más accesible que el agua, porque se puede beber del grifo sin necesidad de comprarla", asegura.
Además, la especialista ha preparado dos menús diarios saludables y a la vez baratos para ayudar a las familias a planificar su alimentación:
Menú 1. Precio: 5,54 euros.
Desayuno. Tostada de pan integral con tomate triturado y aceite de oliva virgen extra + un café con leche.
Pan integral (50g): 0,22 euros + tomate triturado casero (1/2 u): 0,10 euros + aceite de oliva virgen extra (10ml): 0,05 euros, sal + café de cafetera italiana tueste natural (10g): 0,068 + leche entera de vaca (200ml): 0,15 euros. Total: 0,60 euros.
Media mañana. 1 tajada de melón.
Melón (200g): 0,18 euros. Total: 0,18 euros.
Comida. Ensalada de garbanzos con atún y huevo cocido + 1 tajada de sandía + agua.
Garbanzos cocidos de conserva (100g): 0,17 euros + tomate (1u): 0,20 euros + lechuga romana (1/4): 0,19 euros + 1 huevo L: 0,17 euros + 1 lata de atún al natural: 0,66 euros + aceite de oliva virgen extra (10ml): 0,05 euros + vinagre de vino (10ml): 0,0057 euros, sal. Tajada de sandia (200g): 0,19 euros. Total: 1,65 euros.
Cena. Pisto manchego + Pechuga de pollo a la plancha + 1 melocotón + agua.
Pisto manchego: 1/2 cebolla mediana: 0,10 euros+ 50 g de pimiento rojo: 0,25 + 50g de pimiento verde: 0,10 euros + tomate (2u): 0,40 euros + 75g de calabacín: 0,15 euros + aceite de oliva virgen extra (20ml): 0,10 euros + sal, pimienta. Pechuga de pollo (250g): 1,50 euros. Melocotón (200g): 0,51 euros. Total: 3,11 euros.
Menú 2. Precio: 6,08 euros.
Desayuno. Gachas de avena con nueces + plátano + infusión.
Gachas de avena: copos de avena (30g): 0,04 euros + nueces naturales (20g): 0,15 euros+ plátano de Canarias (100g): 0,35 euros + bebida vegetal de avena (200ml): 0,20 euros. infusión de manzanilla en bolsita: 0,03 euros. Total: 0,77 euros. Media mañana: 1 Yogur natural. 1 Yogur natural: 0,15 euros. Total: 0,15 euros.
Media mañana. 1 Yogur natural.
1 Yogur natural: 0,15 euros. Total: 0,15 euros.
Comida. Lubina al horno con patatas, cebolla y berenjena + pera ercolina.
Lubina (300g): 2,33 euros + 1 patata mediana: 0,20 euros + 100g de berenjena: 0,17 euros + aceite de oliva virgen extra (10ml): 0,05 euros, sal, pimienta + 1 pera ercolina: 0,36 euros. Total: 3,11 euros.
Cena. Salmorejo + Montadito de queso fresco + ciruela.
Gazpacho andaluz: tomate (3u): 0,60 euros + aceite de oliva virgen extra (20ml): 0,10 euros + pan integral (30g): 0,13 euros + jamón serrano (20g): 0,30 euros + 1 huevo L: 0,17 euros + sal y ajo. Queso curado manchego (30g): 0,50 euros. Ciruela roja (2u): 0,25 euros. Total: 2,05 euros.
Para la nutricionista todo menú diario debe incluir hortalizas o verduras."Estos alimentos deben ser el pilar fundamental de nuestra alimentación. Asimismo, si a estos ingredientes se le añade una proteína de calidad (huevo, carne, pescado y legumbres) conseguiremos una comida bastante equilibrada", analiza.
Por último, las comidas se deben adaptar a las costumbres de cada casa y a las fluctuaciones de los precios y ofertas que se encuentran diariamente en los mercados, así como a la estacionalidad de los productos.