Guadalajara es una provincia que merece una escapada en cualquier época del año, pero especialmente en Navidad. Y es que la capital y los pueblos se visten con sus mejores galas durante estas semanas llenando de magia y color las calles.
Son muchos los municipios de Guadalajara que se vuelcan con esta festividad y que logran impresionar cada año a los vecinos y turistas que los visitan. Uno de ellos, a una y media de Madrid, es Sigüenza.
Un lugar cargado de historia
Esta localidad, ubicada a una hora y media de Madrid, está cargada de historia, ya que se trata de un lugar habitado desde el Neolítico y el Paleolítico. Una villa medieval que destaca por su buen estado de conservación a lo largo del tiempo.
Esta ciudad ha sido testigo del paso de diferentes culturas por sus calles, como son los celtiberos, romanos, visigodos y árabes, y cuenta con un precioso castillo de estilo altomedieval que fue construido en el siglo XII y que hoy en día es un Parador Nacional.
Otro de los puntos de interés de la localidad es su catedral de estilo cisterciense o primer gótico, que destaca por contar con el sepulcro de 'El Doncel de Sigüenza', que era miembro de la familia de los Vázquez de Arce, caballero de Santiago, que murió en la guerra de Granada.
También destacan otros monumentos, como la plaza Mayor, el barrio Humanista, la casa Plateresca o el Palacio Episcopal, y su increíble entorno natural, ya que desde el pueblo se puede ver el paso alto de Henares y los valles de los ríos Dulce y salado.
Además, durante la Navidad, el Ayuntamiento de Sigüenza organiza decenas de actividades culturales, deportivas, infantiles y tradicionales. Entre ellas, conciertos, exposiciones y talleres para los más pequeños.