Pedro Sánchez ha decidido ponerle buena cara al mazazo que ha supuesto para el PSOE el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En un acto organizado por la revista Mongolia en Madrid el líder de los socialistas ha restado importancia al sondeo.

"Los españoles tratan mucho mejor a los socialistas que las empresas demoscópicas", ha dicho. El PSOE no ha decidido aún dar carta de naturaleza a esos sondeos. "El PSOE hoy creo que tiene mejores condiciones y más opciones" de "ganar las elecciones". Sánchez ha asegurado que él siempre ha tenido las encuestas en contra y que él no es un "sociólogo" sino un "político" que prefiere hablar de soluciones. "Si los socialistas vamos a votar el 26 de junio, Rajoy es historia", ha confiado. 

"Resistir es avanzar"

"Resistir es avanzar", ha dicho en referencia a la crisis de la socialdemocracia, sobre la que él lleva oyendo hablar décadas. "Hay momentos en los que hay que resistir", según él.

En un ambiente distendido, Sánchez se ha mostrado relajado pese al impacto que ha tenido la encuesta en la moral de las filas socialistas. Eso sí, el grado de los reproches a Podemos va en aumento. "Les recomiendo que no compren ningúno de los productos del catálogo de Podemos", ha dicho. Según él, no se puede montar un mueble como una "mesa camilla" con "la hoz y el martillo". 

Sánchez ha advertido de que no sólo Iglesias defiende políticas extremas sino también Alberto Garzón, el líder de IU. Aunque habla "más flojo", cree que la democracia es un "régimen continuista del franquista" y sus políticas serían muy perjudiciales. 

Financiación de Podemos

Sánchez no ha evitado las preguntas sobre la financiación de Podemos y sus vínculos con Venezuela e Irán. "Me preocupa más la de Irán", ha dicho, ya que es sospechoso que a un "profesor universitario" le pague las facturas del teléfono móvil un empresario vinculado a ese país. "No se me hubiera ocurrido en la vida", ha dicho sobre sí mismo.

El candidato socialista también ha hablado de las verdaderas intenciones que, según él, tiene el líder de Podemos. "Yo creo que Iglesias es buena persona", pero que tiene una prioridad mayor que desalojar a Rajoy de la Moncloa: que no gobierne el PSOE. "Yo he visto rencor en él", ha dicho. "Ahora me tiende la mano, pero después de las elecciones me dirá 'el de la cal viva'", augura.

Según él, antes por la calle le decían: "Yo no te voté para que pactes con el PP". Ahora: "Con el Iglesias este, a ningún lado".

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