"Solo al soñar tenemos libertad, siempre fue así y siempre así será", dijo el entrañable maestro del Club de los poetas muertos, John Keating, interpretado Robin Williams. Y una de las grandes fábricas de sueños es el cine.
Pero el séptimo arte, además de hacernos soñar, también sirve como herramienta imprescindible para educar y trasmitir conocimiento. Sin embargo, no está del todo incorporado en el sistema educativo de nuestro país.
Desde la educación obligatoria hasta los estudios universitarios, todos los niveles de aprendizaje podrían verse beneficiados de los saberes de la gran pantalla. Porque, como se pregunta César Lázaro, el cerebro detrás del Madrid EducaCiencia Film Festival, "¿cómo puede ser que no hayamos evolucionado?, ¿cómo puede ser que mis hijos sigan aprendiendo igual que lo hacía yo?".
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Con su iniciativa personal que surge, como cuenta, de "la observación", Lázaro busca darle una vuelta de tuerca a la manera en que se abordan contenidos como la tecnología, la robótica, la biología, la astronomía, la física, la geología, la química o, incluso, la inclusión social dentro del aula. Para ello, precisamente ha creado este festival de cine, medio camino de proyecto pedagógico, que, asegura, tiene como objetivo que se deje de darle "tanto valor" a las notas y se ponga el énfasis en "la propia educación" y el "propio aprendizaje".
Esos fueron, dice Lázaro, los motivos por los que creó el Madrid EducaCiencia Film Festival. Un proyecto que, al fin de cuentas, nace como "una solución", como "un festival educativo donde la gente participe y vea cómo se puede estudiar de otra manera". Además, insiste, "implicando a profesores y alumnos" para que aprendan los que participan y los que ven el resultado final en forma de "pequeñas películas".
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Películas de profes y alumnos
Pero, ¿qué es lo más original de esta propuesta? Lázaro asegura que lo que distingue a su festival de cine online de otros es que "las películas las hacen profesores, alumnos y centros educativos de todo el mundo". Y es que, aunque esta primera edición del Madrid EducaCiencia Film Festival cuenta con el apoyo del área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, no quiere circunscribirse solo a la capital.
Lázaro aspira a que su festival se convierta en una plataforma global, en la que no solo se presenten cortometrajes y se voten los mejores, sino que se compartan contenidos educativos sin importar la procedencia. Porque "¿a quién no le interesa saber cómo dan clase en Finlandia, en Canadá o en Marruecos?", reconoce el creador de la iniciativa. Y así, "aprender todos de todos".
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Aunque solo lleve en marcha desde noviembre, parece estar consiguiendo su objetivo: "Los centros educativos más activos son los andaluces", explica Lázaro a ENCLAVE ODS. Eso sí, asegura que siguen "llamando a la puerta" de colegios, institutos y universidades de todo el país para que se sumen a la iniciativa hasta el 30 de abril, fecha en la que se cierra el periodo de participación.