Los niños son una fuente sin fin de energía, bien lo saben los padres. Cuando corren, saltan y juegan usan una enorme cantidad de energía. Y como dijo el francés Antoine-Laurent, la energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma, pero ¿cómo se podría aprovechar esto ?
Esa es la idea detrás de Eco Swing, el último invento de la empresa española Play4energy que busca aprovechar los columpios. Estos artilugios tan cotidianos y sencillos son una generadora de energía continua con el sistema de dinamo. Una forma divertida de generar energía limpia casi sin esfuerzo.
Su mecanismo es muy simple: se trata de un columpio con una batería donde se almacena la energía generada por el movimiento del balanceo de la persona al columpiarse que, además, cuenta con cuatro tomas de corriente localizadas en un lateral del columpio.
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Play4energy es una empresa que busca desarrollar elementos urbanos capaces de generar energía sostenible y renovable. También quieren fomentar la concienciación social de pequeños y mayores por la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Sus planes están en aplicar estas dinamos a elementos de uso cotidiano, como columpios o las máquinas de los gimnasios urbanos.
Fernando Borja de Sarachaga, CEO de Play4energy, comenta: “Presentamos nuestro columpio Eco Swing al público para que niños y mayores puedan disfrutar columpiándose en él mientras cargan sus dispositivos. Estamos liderando esta innovación tecnológica y poniéndola a disposición de empresas y organismos públicos para su uso”.
Y añade: “Creemos firmemente en que es necesario que toda la sociedad se implique en conseguir un mundo más sostenible. Por ello, creamos productos fácilmente adaptables y utilizables por cualquier tipo de público y en cualquier ámbito de la vida cotidiana.”
El columpio lo instalarán en Madrid, concretamente en el Mercado de Motores que se celebra en el Museo del Ferrocarril los próximos 13 y 14 de abril. Este prototipo no genera una gran cantidad de energía como para cargar un coche eléctrico, pero más que suficiente como para cargar móviles y tabletas.
De Sarachaga explica: "Tienen una batería de 18 ha, que proporciona suficiente energía para cargar hasta cuatro dispositivos, aunque siempre se puede instalar una mayor capacidad". Esto puede ser muy útil para padres y madres cuando estén en el parque con sus peques.
Además, las baterías se pueden cargar para su posterior uso. Es una manera divertida y entretenida de concienciar a los más jóvenes, así como una forma amena de recargar el móvil en mitad de la calle.
De Sarachaga ve un futuro para estos prototipos en parques, centros comerciales, aeropuertos o estaciones de tren, metro y autobuses. Idealmente en sitios de mucha afluencia.
Ya en otros países hay otros prototipos, como un panel en la estación de Shibuya en Japón que genera energía con los pasos de los viandantes y sirve para alimentar las luces de Navidad o las tuberías inteligentes que generan energía con el agua que pasa por ellas. Estas ideas se pueden integrar en el mobiliario urbano sin que altere el paisaje de la ciudad.
La generación de energía es la principal responsable de la generación de gases de efecto invernadero, pero, a la vez, es necesaria para el desarrollo de la vida tal y como se conoce. Por eso hay que buscar todas las formas posibles de generar energía limpia, hasta cuando se juega.