El Ayuntamiento de Amberes ha puesto en marcha una iniciativa llamada ‘Neighborhood in Bloom’ por la que invita a sus ciudadanos a ser más ecológicos regalándoles árboles.
Hasta el 30 de septiembre, la ciudad belga entregará 2.000 árboles a los residentes que dispongan de un jardín o un espacio sin pavimentar para plantarlos.
Para el proyecto se han seleccionado 20 tipos de árboles que se adaptan bien al entorno urbano. Un breve cuestionario sobre la cantidad de espacio y luz solar disponible en casa ayuda a determinar qué tipo de árbol es el más adecuado.
Se espera que la iniciativa además, ayude a enfriar la ciudad durante el verano, mejore la calidad del aire y cree más zonas de reproducción para aves y otros animales.
Un jardín móvil
El proyecto, que no es nuevo, ya se puso en marcha el verano pasado con un llamativo tranvía lleno de follaje.
El coche, que circulaba por la línea 1 de la ciudad, se transformó en un exuberante jardín móvil durante un día, con plantas en todos los espacios disponibles.
Barrio en flor
Este programa está enmarcado en el plan ‘Barrio en flor’ (Buurt en Bloei). El objetivo final es animar a los ciudadanos a involucrarse en la jardinería para transformar su ciudad en un lugar más verde y saludable para vivir.
Como parte de la iniciativa, el Ayuntamiento de Amberes también ofrece a los jardineros urbanos en ciernes ‘jardines verticales’ de forma gratuita.
Quienes viven en el distrito central de la ciudad pueden solicitar al Ayuntamiento plantas, guirnaldas para colgar entre las casas, en las calles y en los árboles. También ofrecerá ayuda financiera a aquellos que quieran comprar un barril de recogida de agua de lluvia para regar sus jardines.
El plan se repite después del gran éxito conseguido en 2022, cuando los habitantes de Amberes se inspiraron para crear más de 200 jardines en fachadas, 170 áreas de árboles y 100 guirnaldas.
¿Cuáles son los beneficios de estos huertos urbanos? Pues no sólo es estéticamente agradable, sino que las plantas y los árboles ayudan a reducir las temperaturas en las ciudades y mitigar el llamado efecto de ‘isla de calor urbana’, ya que las áreas urbanas son significativamente más cálidas que las áreas rurales circundantes como resultado de las actividades humanas.
También disminuye la contaminación y ayuda a que el aire sea más limpio. Por supuesto, según los especialistas, atraen pájaros que anidan, ardillas y muchos insectos. Sin hablar de la mejora en el bienestar mental de quien trabaje un jardín urbano capaz de levantar el ánimo.