Existen destinos que por sí solos resultan una auténtica joya y, en España tenemos muchos de esos. Pero, si eres amante de los lugares únicos, la Cueva del Tesoro, perteneciente al malagueño municipio de Rincón de la Victoria, debe colarse en tu lista de visitas imprescindibles.
Se trata de la única cueva de origen marino que hay en toda Europa y una de las tres en el mundo, lo que la convierte en un auténtico tesoro geológico y turístico. Las otras dos cuevas de este tipo se encuentran en Asia y América Central, lo que hace que este rincón de la Costa del Sol sea aún más especial para quienes buscan algo diferente.
La Cueva del Tesoro, también conocida como Cueva del Higuerón, es una maravilla natural formada hace millones de años durante el período Jurásico, cuando el mar Mediterráneo cubría gran parte de la región.
A lo largo de los siglos, la acción constante del agua marina moldeó las galerías y salas de la cueva, creando un laberinto subterráneo espectacular. A diferencia de la mayoría de las cuevas, que son el resultado de la erosión por agua dulce de ríos y lluvias, esta fue esculpida por el mar, lo que le da un carácter absolutamente singular.
En su interior, se han encontrado pinturas rupestres, restos arqueológicos del Paleolítico y la Edad de Bronce, así como cerámicas neolíticas, lo que sugiere que esta cueva fue un lugar de culto y refugio para los primeros habitantes de la región.
La historia de la Cueva del Tesoro
Esta increíble cueva no solo destaca por su rareza geológica, sino también por la historia que guarda en sus paredes. A lo largo de los siglos, sus galerías han sido testigo de la presencia humana desde tiempos prehistóricos.
Todo lo que rodea a la Cueva del Tesoro está envuelta en leyendas fascinantes. Según una antigua historia, en sus profundidades se esconde un tesoro perteneciente a una dinastía de reyes almorávides.
Durante el siglo XVIII, estos gobernantes habrían intentado trasladar sus riquezas hacia Al-Ándalus, pero el tesoro se perdió en el mar y terminó en las entrañas de la cueva.
Muchos aventureros dedicaron años de sus vidas a intentar encontrarlo, como el suizo Antonio de la Nari, quien pasó 30 años buscando el mítico botín, aunque sin éxito. De la Nari falleció en una explosión mientras trataba de abrirse paso en la cueva con dinamita.
Visitar la Cueva del Tesoro
Explorar la cueva es una visita que no puedes dejar de hacer si te encuentras en Málaga. Al llegar al Rincón de la Victoria, a pocos kilómetros de la ciudad, encontrarás un impresionante acantilado en el Cantal, donde comienza tu aventura subterránea.
La entrada a la cueva está marcada por un cartel que muestra un ciervo, una bienvenida simbólica que te prepara para lo que te espera en el interior: un recorrido de 2.500 metros a través de cavidades naturales.
El recorrido por la Cueva del Tesoro te llevará por diferentes salas y galerías, cada una con su propio encanto. Entre ellas destacan la Sala del Lago y la Sala del Águila, donde podrás admirar pinturas rupestres y restos arqueológicos de diferentes épocas, incluidos el Neolítico y la época fenicia.
Además, en la sala de Marco Craso, descubrirás la historia de cómo este político y aristócrata romano se escondió en la cueva durante ocho meses. Esta mezcla de historia, mitología y naturaleza hace que la visita sea una experiencia única y muy recomendable para todos los públicos.
Destino turístico para todos
La Cueva del Tesoro no solo es un destino de interés para amantes de la geología y la arqueología, sino también para cualquier persona que busque disfrutar de la belleza natural y la historia.
Los precios de entrada son accesibles, lo que permite que tanto turistas como locales puedan disfrutar de este tesoro único en el mundo. Los adultos (entre 15 y 64 años) pueden acceder por menos de cinco euros, mientras que jubilados, niños de 4 a 14 años y estudiantes pagan menos de tres euros.
Además, la cueva ofrece visitas teatralizadas todos los últimos domingos de cada mes, por un precio de cinco euros. Durante estas visitas, los personajes históricos cobran vida, y tanto niños como adultos podrán aprender sobre los misterios y leyendas que rodean a la Cueva del Tesoro mientras exploran sus recovecos.