El incremento de la población mundial -que según Naciones Unidas en 2050 podría superar los 9,7 mil millones de personas-, combinado con la dependencia energética que generan los grandes avances tecnológicos, conduce a un aumento global de la producción y consumo de energía. Sin embargo, el acceso desigual a la electricidad, especialmente en las zonas rurales de los países en desarrollo, dificulta el día a día de millones de personas en todo el mundo. Aunque, según Naciones Unidas, la electrificación de estas haya aumentado entre 2015 y 2017, la brecha con respecto a las zonas urbanas continúa siendo notable.
Una desigualdad todavía más presente en algunos lugares donde la mayoría de la energía se genera aún con combustibles fósiles, como el carbón o el petróleo. Francesco La Camera, director general de la Agencia Internacional de Energías Renovables destacaba la importancia de realizar esfuerzos, incluidos los flujos financieros públicos internacionales, para ayudar a aquellos países que más lo necesitan a descarbonizar su sistema eléctrico.
El ODS en cifras
- El número de personas sin acceso a la electricidad se ha reducido de 860 millones en 2018 a 770 en 2019, último año del que hay cifra global actualizada.
- Un tercio de la población mundial (2.600 millones de personas) no tiene acceso a formas limpias y seguras de cocinar.
- En 2020, la generación eléctrica a través de renovables aumentó un 3% a nivel mundial.
- La utilización de energías renovables en transporte es de las más bajas, solo un 3,4%.
- La covid-19 ha provocado una desaceleración de la electrificación en todo el mundo, y cerca de 620 millones de personas no tendrán acceso a luz eléctrica en 2030.
Metas para 2030
- Garantizar el acceso universal a servicios energéticos asequibles, fiables y modernos.
- Aumentar el uso de energías renovables como fuentes energéticas, como la solar, la eólica o la termal.
- Duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética.
- Incrementar la cooperación internacional para que las zonas con mayor escasez de energías puedan obtener nuevas alternativas limpias y eficientes.
- Ampliar la infraestructura y el uso de tecnologías para crear servicios energéticos modernos y sostenibles en todos los países en desarrollo.
El ODS en España
- En 2020, el 53,8% del parque de generación eléctrica español fue renovable.
- El 44% del total de la energía consumida en España en 2020 procedía de fuentes renovables.
- Las emisiones de CO₂ asociadas a la producción de electricidad se redujeron un 27,8% el año pasado.
- La pandemia redujo la demanda de electricidad en España en 2020 en un 5,6% respecto al año anterior, pero aumentó el consumo en los hogares en un 21%.