Conocido como el padre de la biodiversidad, Edward Osborne Wilson murió el domingo 26 de diciembre en Burlington, Massachusetts. Dedicó gran parte de su vida a la investigación de las hormigas y otros insectos, por lo que recibió numerosos galardones como dos premios Pulitzer por sus obras On Human Nature (1978) y el libro The Ants (1990), escrito en colaboración con Bert Hölldobler, entomólogo alemán.
La Fundación para la Biodiversidad E.O. Wilson ha hecho público su fallecimiento con un mensaje que destaca su gran labor como científico, naturalista y, como indican, "nuestra inspiración". Desde la organización aseguran que fue conocido como "el heredero natural de Darwin" y conocido como "el hombre hormiga", por su trabajo pionero como entomólogo.
David J. Prend, presidente de la directiva de la fundación, señala que “sería difícil subestimar los logros científicos de Ed, pero su impacto se extiende a todas las facetas de la sociedad. Fue un verdadero visionario con una habilidad única para inspirar y galvanizar. Expresó, quizás mejor que nadie, lo que significa ser humano. Su contagiosa curiosidad y creatividad han dado forma a la vida de muchos, incluido yo mismo, y me siento afortunado de haberlo llamado amigo".
El biólogo acuñó y popularizó el término biodiversidad, tan utilizado hoy. Además, recibió 130 galardones por su trayectoria entre los que destacan la Medalla Nacional de la Ciencia (Estados Unidos), el Premio Internacional de Biología (Japón) y el Premio Crafoord de la Real Academia Sueca de Ciencias, según informan desde el Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC).
Su libro La Teoría de la Biogeografía Insular (1967), escrito en colaboración con Robert MacArthur, es considerado, según explica la Agencia SINC, como "un texto estándar de ecología y en la base del principio científico del equilibrio de las especies".
Wilson estudió en la Universidad de Alabama y en 1955 se doctoró en Entomología en la Universidad de Harvard. En esta institución fue también catedrático. Además de ser doctor honoris causa en 40 universidades, dedicó su vida a estudiar la naturaleza y a promover la protección de la biodiversidad.
Half-Earth o medio planeta
El entomólogo fue asesor de organizaciones científicas y de conservación de todo el mundo. Y autor de más de 30 libros y artículos científicos. Desde la fundación que lleva su nombre explican que fue "creador de dos disciplinas científicas, incluida la sociobiología, y los avances en la conservación global".
Destaca especialmente su libro Medio planeta, la lucha por las tierras salvajes en la era de la sexta extinción (Errata Naturae, 2017). Es en este libro donde Wilson explica que si la mitad de los hábitats del planeta se destinaran a la vida silvestre, entre el 80% y 90% de todas las especies podrían salvarse.