La comunidad científica lleva décadas alertando del impacto del cambio climático en el planeta. La falta de medidas y la emisión continuada de gases de efecto invernadero está llevan al mundo al límite. En nuestro país, ahora un equipo científico internacional ha demostrado cómo el sur de la Península está sufriendo especialmente sus consecuencias.
Este proyecto de investigación de la Universidad de Granada ha revelado el impacto del cambio climático y de la acción humana en el medio ambiente de esta zona tras estudiar los sedimentos depositados en lagunas y humedales de Sierra Nevada y alrededores.
El estudio ha permitido corroborar el impacto de la acción del hombre en el medio ambiente, que se hace evidente desde hace 4.000 años por un aumento en la frecuencia de incendios y por la presencia de contaminación por plomo provocada por la minería.
Los análisis de geoquímica permiten observar las variaciones químicas que sucedieron en los lagos
Y revela también la presencia creciente del cultivo de olivo en las faldas de Sierra Nevada y la repoblación con pino en las últimas décadas, informa la Universidad de Granada, cuyos profesores del departamento de Estratigrafía y Paleontología Antonio García-Alix y Gonzalo Jiménez dirigen el proyecto.
Un estudio multidisciplinar
Este trabajo de investigación está permitiendo realizar un análisis multidisciplinar de las señales biológicas, físicas y químicas que han quedado registradas en los sedimentos depositados en los lagos alpinos y en la turbera de El Padul, donde se encuentran registros de múltiples ciclos glaciares e interglaciares acaecidos durante el último millón de años.
El proyecto, en el que participan científicos de más de diez universidades y centros de investigación de cinco países, ha incluido análisis de polen que han revelado cambios en la vegetación que crecía en la región.
Los carbones muestran por su parte la presencia y variaciones en la abundancia de incendios en la zona cercana a los lagos, mientras que los gasterópodos y ostrácodos ofrecen información relevante sobre las variaciones ocurridas en las condiciones internas del lago.
Además, los análisis de geoquímica permiten observar las variaciones químicas que sucedieron en los lagos y sus alrededores, así como los aportes eólicos de polvo sahariano.
Los ecosistemas en Sierra Nevada no sólo han variado por causas naturales, también por el ser humano
La investigación muestra, además, que un periodo de tiempo relativamente húmedo y cálido en esta región es el periodo Ibero-Romano, en el que aumentan sensiblemente las especies forestales.
Pero los ecosistemas en Sierra Nevada no sólo han variado por causas naturales, ya que el hombre ha poblado la zona desde hace milenios y su impacto se hace evidente en los detalles que revela el estudio.
Todos estos datos muestran, según los científicos, que en las lagunas del sur de la Península Ibérica hay información muy valiosa aún por descubrir y que puede ayudar a comprender cómo responderán los ecosistemas frente al cambio global.