Un piso en el que conviven estudiantes y personas con discapacidad para empezar una vida independiente; los primeros en un entorno asequible y los segundos un ambiente seguro. Financiar un proyecto de salud en un campo de refugiados en Uganda que ha alcanzado la categoría de ciudad estable. O un comedor social que ayuda a la integración de los colectivos en riesgo de exclusión y, además, da comida a los más necesitados. Estos son solo tres ejemplos de los más de 340 proyectos solidarios que financia la Fundación Mutua Madrileña.
"Siempre estamos pendientes de dónde se encuentran, en cada momento, las mayores necesidades sociales", señaló Lorenzo Cooklin, director general de la Fundación Mutua Madrileña, el año pasado en la presentación de la XII edición de las ayudas. Este año han dado otro paso de un millón de euros y han abierto la convocatoria de Ayudas a Proyectos Sociales.
Desde su primera edición, hace más de diez años, han financiado más de 340 proyectos con casi 9 millones de euros. Se centran en programas inspiradores de las oenegés que ponen el foco en cuestiones de la sociedad, muchas veces desatendidas. La gran barrera que encuentran estos colectivos es la financiación y este tipo de iniciativas intenta solventar ese dilema.
Las organizaciones, precisamente, se centran en problemas enquistados como la violencia de género, la inclusión de las personas con discapacidad o la cooperación al desarrollo. En total, cerca de 390.000 personas en situación de necesidad se han beneficiado directamente de estos proyectos.
Los esbozos de solidaridad se dan en España y en iniciativas más allá de las fronteras, como el proyecto español que quiere proporcionar agua a tres colegios de Sierra Leona, ofreciendo agua limpia y potable a los estudiantes y la comunidad en el distrito de Bombali. Un factor clave, ya que el 80% de las enfermedades transmisibles pasa por un sistema de depuración defectuoso y es un problema sanitario de primer orden, según la OMS.
Las ayudas
La Fundación Mutua Madrileña lleva más de dos décadas volcada en su compromiso de contribuir a la mejora social a través de cuatro áreas de actuación: el apoyo a la investigación médica, la difusión de la cultura, la promoción de la seguridad vial y la acción social. Fundamentalmente, apoya a los colectivos más desfavorecidos, con los recursos que proporciona Grupo Mutua Madrileña y la colaboración con otras entidades públicas o privadas.
Su acción se desarrolla en seis categorías: discapacidad, violencia de género y trata, ayuda a la infancia, integración laboral de jóvenes en riesgos de exclusión, apoyo a los mayores y personas sin hogar y la cooperación en al desarrollo.
El plazo para que las organizaciones presenten sus propuestas empieza el 4 de septiembre hasta el 25. Estos fondos ayudarán a llevar adelante programas que intentan mejorar la sociedad de algún modo, por difícil que sea.
Gracias a estas iniciativas, no solo ayudan al proyecto en sí, sino que además apoyan la visibilización de estas problemáticas. Es precisamente gracias al apoyo de varios colectivos y a nivel privado, público y social, que estas personas pueden disfrutar de una integración completa.