Desde hace muchos años, la gestión diaria que se realiza desde los ayuntamientos nos ha permitido darnos cuenta de la importancia de no dejar a nadie atrás. Que las ciudades sean capaces de hacer sus territorios más habitables, sostenibles, integradores e innovadores para poder mantener a medio y largo plazo un ritmo de crecimiento y desarrollo a la altura de las aspiraciones de su ciudadanía.
Estos son ideas y conceptos que cobraron especial relevancia a partir del 25 de septiembre de 2015, fecha en la que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó por unanimidad la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, y que de alguna manera ya estaban en el trasfondo de la gestión más cercana a la ciudadanía.
El pleno del Ayuntamiento de la ciudad aprobó a principios de 2018 que Málaga se incorporase al proceso mundial de localización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.
Por eso, los ODS y el logro de sus metas se han ido integrando de manera natural en una planificación municipal que ya formaba parte de nuestra gestión mediante los planes estratégicos de 1996 y 2006 y a través de la Fundación Ciedes, y que impulsó la redacción y puesta en marcha del Plan de Acción ODS Málaga 2030.
Los agentes clave de la ciudad, como son la Universidad de Málaga, la Confederación de Empresarios, las organizaciones sindicales, la Diputación Provincial o múltiples empresas de todos los tamaños, se han ido sumando desde el año 2015 a lo que hemos llamado la Red de Agentes ODS Málaga. Esto nos ha permitido publicar desde 2018 los primeros informes voluntarios de progreso de nuestra ciudad en el logro de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
El objetivo principal que nos anima no es otro que el de hacer frente a los retos sociales, económicos, medioambientales y de buen gobierno, poniendo en el centro a las personas, el planeta, la prosperidad, la paz y las alianzas.
Por eso la Agenda 2030 propone localizar sus objetivos en ámbitos subnacionales, implicando a las ciudades y a todas las personas. Los gobiernos locales hemos entendido desde el principio que debíamos ser protagonistas principales en su construcción, para asegurar que los retos y el potencial de las ciudades fueran tenidos en cuenta.
Tenemos como objetivo claro conseguir hacer de Málaga una ciudad más inclusiva, segura, resiliente y sostenible
Además, trabajamos de forma coordinada y decidida con las agencias internacionales instaladas en la ciudad, como el Instituto de las Naciones Unidas para Formación Profesional e Investigaciones (UNITAR, por sus siglas en inglés) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Anualmente, somos sede de múltiples eventos internacionales que acogen a representantes políticos, expertos, investigadores y todo tipo de personas interesadas en reflexionar y trabajar por la sostenibilidad ambiental, social y económica del modelo de desarrollo urbano actualmente existente.
Estoy seguro de que el compromiso con la Agenda 2030 seguirá creciendo en Málaga en los próximos años, y es mi empeño personal, no sólo institucional, que así sea. Tenemos como objetivo claro conseguir hacer de Málaga una ciudad más inclusiva, segura, resiliente y sostenible, y todo ello lo conseguiremos con la apuesta por la educación.
Para el Ayuntamiento de Málaga, el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 4 (Educación de calidad) es uno de los objetivos prioritarios: "garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover las oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos".
Los gobiernos locales hemos entendido que debíamos ser protagonistas principales en la construcción de la Agenda 2030
Su majestad El Rey Felipe VI, en su intervención en la Cumbre de Naciones Unidas sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en New York el 25 de septiembre de 2015, decía: "Es esencial conseguir un desarrollo con equidad, el disfrute real y efectivo de derechos y la igualdad de oportunidades para todos".
E indicaba que "para ello es necesario generar oportunidades, tanto en la educación (y de ahí el impulso al conocimiento, la innovación y la tecnología), como en la creación de puestos de trabajo, especialmente de empleo juvenil, ámbito en el que España es particularmente sensible".
Son palabras que nos animan a seguir trabajando en el empeño de la mejora de la educación en nuestro país y en nuestras ciudades. Es la garantía del futuro más próspero y sostenible que queremos alcanzar, mediante la mejora de las capacidades y de las cualidades de las generaciones que hoy se forman en los centros educativos en todas y cada una de las etapas de formación.
Estoy convencido de que lo lograremos con la implicación de la ciudadanía y de las instituciones públicas y privadas en un esfuerzo común por Málaga, por Andalucía, y por España.
*** Francisco de la Torre es alcalde de Málaga.