El sinhogarismo ha sido históricamente un tema olvidado, relegado a los márgenes de las prioridades políticas y sociales. Tanto es así, que actualmente no se sabe con certeza cuántas personas viven en la calle en la UE: se estima que cada noche, al menos 895.000 personas en la Unión Europea se encuentran en situación de sinhogarismo de calle. En España, HOGAR SÍ, junto a otras entidades sociales, estima que hay más de 37.000 personas en situación de sinhogarismo.

Durante la pandemia de Covid-19, valoramos verdaderamente la importancia de tener un hogar. De repente, nos dimos cuenta de que una vivienda es algo más que un techo; es una necesidad que garantiza el ejercicio de otros derechos humanos fundamentales, especialmente el derecho a la salud. No tener un hogar afecta de manera directa la recuperación tras una enfermedad o intervención médica, el seguimiento de un tratamiento médico, pudiendo recibir quimioterapia o el afrontar de manera digna el proceso de fin de vida.

Durante la crisis sanitaria, vimos ejemplos concretos de cómo los decisores políticos tomaron verdadera conciencia de la dimensión del problema. El Parlamento Europeo, por ejemplo, abrió sus puertas para alojar a personas en situación de calle en sus instalaciones vacías.

Sin embargo, esta acción fue una respuesta a una urgencia. Para erradicar el sinhogarismo son necesarias respuestas eficientes, estructurales y sostenidas que den un hogar a las personas para que inicien sus procesos de integración social.

El 21 de junio de 2021 se firmó la Declaración de Lisboa, dando origen a la Plataforma Europea para Combatir el Sinhogarismo. Esta plataforma se compromete a acabar con el sinhogarismo en Europa para el año 2030. Entre sus objetivos se incluyen garantizar que nadie duerma en la calle por falta de alojamiento de emergencia y asegurar que nadie sea discriminado por su situación de sinhogarismo.

Entre el 6 y el 9 de junio se celebrarán las elecciones al Parlamento Europeo y posteriormente se renovará la Comisión Europea. El mandato de estas dos instituciones durará hasta mediados de 2029, es decir, casi el tiempo límite para cumplir con los compromisos de Lisboa. Por lo tanto, estas elecciones son cruciales y debemos exigir que se cumplan los compromisos adquiridos.

Por ello, desde HOGAR SÍ lanzamos la campaña #HomEU, en la que, a través de un manifiesto se hace un llamamiento a los candidatos y las candidatas para que atiendan las propuestas de la entidad e integren el compromiso de Lisboa en sus programas electorales, adoptando medidas efectivas para garantizar una vivienda digna. El sinhogarismo no debe gestionarse, sino solucionarse y se debe apostar por medidas eficientes basadas en vivienda para acercarnos al objetivo de la erradicación.

Estas elecciones son nuestra oportunidad para reafirmar nuestro compromiso con una Europa donde nadie tenga que dormir en la calle.

Firma por un futuro donde nadie tenga que dormir en la calle. Actúa por una Europa que fortalezca los derechos de todos sus ciudadanos.

José Manuel Caballol es director general de HOGAR SÍ.