Después de un verano en el que se han batido todos los récords de temperaturas y destructoras tormentas a lo largo y ancho de la geografía mundial, la preocupación por el cambio climático y por el buen aprovechamiento de los recursos naturales es un tema crucial. También para la realeza que debe predicar con el ejemplo para tratar de crear conciencia en la población.

    Muchos de sus miembros no son ajenos a esta problemática y se han convertido en verdaderos referentes de sostenibilidad de uno u otro modo. Los gestos son importantes, por pequeños que parezcan, y la reina Letizia los tiene, tanto en la visibilidad de firmas de moda sostenibles como en el propio consumo de Zarzuela. Especialmente relevante es el papel del rey Carlos III y su hijo, Guillermo, que llevan a cabo importantes iniciativas para la protección del planeta.

    A continuación, repasamos las diferentes formas con las que reyes, reinas, príncipes y princesas trabajan en esta importante lucha dentro de sus deberes institucionales. Sin olvidar otras temáticas como la salud mental, la protección de los niños o las enfermedades raras. 

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    Letizia

    La Reina ha incorporado a su armario un nutrido grupo de marcas de moda sostenibles, de María Malo, a On Atlas pasando por la línea sostenible de H&M que es quien firma el vestido de gala que lució en su viaje de Estado a Suecia en 2022. A través de sus estilismos, Letizia da visibilidad a diseñadores de la corriente slow fashion y se compromete con el planeta. No sólo eso, entre una de sus muchas aportaciones a Zarzuela está el huerto que ha instalado en los jardines para poder consumir productos frescos y naturales. Su apuesta por lo eco es clara y no duda en visitar ferias de este tipo como BioCultura en Madrid.  Otros gestos significativos son que todas las bombillas de la residencia real son de bajo consumo, se han instalado también paneles solares, se utiliza papel reciclado y se ha prohibido el uso de pesticidas en los jardines reales.

    En otro orden de cosas, la esposa de Felipe VI está muy comprometida con la salud mental, de hecho es embajadora de Unicef en este terreno, y con las enfermedades raras. Son dos de los actos de su agenda personal más importantes para ella, que definen su manera de reinar. 

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    Rania de Jordania

    La esposa del rey Abdalá II promueve el turismo sostenible en su país, en contacto con la naturaleza, reduciendo las emisiones de CO2 y procurando un futuro a las comunidades rurales de Jordania. La propia Rania recorre los parajes más bellos de su país dando ejemplo y promocionando toda su riqueza natural. No sólo eso, el cambio climático está entre una de sus mayores preocupaciones y por eso ha unido fuerzas con el príncipe Guillermo en el consejo de los Premios Eartshot. En unas declaraciones concedidas a la revista ¡HOLA! en 2021, la Reina aseguraba: "Personalmente, el cambio climático es un asunto que me toca muy de cerca. Mi país, Jordania, es una de las cuatro naciones más secas del mundo y compartimos nuestras limitadas reservas de agua con una importante población de refugiados. Con el aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones climáticos, los científicos predicen que Jordania tendrá aún menos lluvias en los próximos años. Los cultivos locales ya están sufriendo, las presas se están secando y el Mar Muerto se está reduciendo. La situación es urgente, pero hay esperanza".

    Por eso, Rania considera que "cuando se trata de salvar nuestro planeta, rendirse no es una opción. No nos podemos permitir el lujo de encogernos de hombros o convencernos a nosotros mismos de que no hay nada que podamos hacer". Ella, desde su posición, aporta su granito de arena a la causa de la sostenibilidad, además de presidir organizaciones benéficas relacionadas con la educación y el futuro de los niños jordanos.

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    Victoria de Suecia

    Son muchos los proyectos eco que la princesa heredera incluye en su agenda institucional. En los últimos meses la hemos visto en el festival Race For The Baltic, que busca proteger la salud del mar Báltico, reduciendo la contaminación, y recorriendo los parques nacionales de Suecia para llamar la atención sobre su cuidado y promoción. Regar los árboles o recoger cañas con aperos de labranza son actividades que Victoria realiza con naturalidad. Pero no sólo eso, la princesa es una de las mayores abanderadas de la moda sostenible, local y de precio asequible. Una de las firmas más recurrentes de su armario es la línea Conscious de H&M. Con sus prendas manda un claro mensaje tanto en galas como en retratos oficiales. Con motivo de su décimo aniversario de boda, la Casa Real publicó nuevos retratos en los que llevaba un vestido largo de la citada firma sueca de sólo 300 euros.

    Por otra parte, la futura reina de los suecos es presidenta de la modalidad juvenil del premio Stockholm Water Prize, conocido por su gran prestigio como 'el Nobel del agua' y que reconoce los avances en este terreno dirigidos a una mayor eficiencia de los recursos, eliminación de residuos y protección del medio.

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    Carlos III

    Una de las claves del reinado del hijo de Isabel II, que acaba de cumplir un año en el trono, es precisamente la sostenibilidad que plasma de diferentes maneras. El compromiso y la preocupación de Carlos III por la conservación del planeta viene de lejos, ya siendo un joven príncipe expresó su alarma por la cantidad de residuos plásticos que contaminaban el entorno y no dudó en afirmar que hablaba con las plantas. En el año 2011 asistió a la cumbre climática de la ONU celebrada en París, y fue rotundo en su discurso: "Es muy simple: debemos salvar nuestros bosques, porque no existe un Plan B para abordar el cambio climático o muchos de los otros desafíos críticos que enfrenta la humanidad sin ellos". Su activismo no se queda en palabras: ha impulsado en Inglaterra iniciativas para impulsar a las empresas en la transición hacia un futuro sostenible y su organizaciòn Prince's Rainforest Project lucha contra la deforestación de las selvas tropicales.

    Hay más, ha grabado documentales sobre este tema, ha sido el primer miembro de una Familia Real en optar por un coche eléctrico y en su residencia de Clarence House, donde vive junto a la reina consorte Camila, hace años instaló placas solares, además de producir sus propios productos del campo sin utilizar fertilizantes químicos. Su labor ha sido reconocida con varios galardones como el premio GCC Global Leader of Change que le dieron en 2017 por la preservación y protección del medio ambiente mundial y por su visión para el futuro de la humanidad. Desde que llegó al trono ha aumentado la participación de parques eólicos en las costas y mares explotadas por el fondo soberano. Los beneficios irán a las arcas públicas para el bien en común. En la imagen, los Reyes de Inglaterra celebran el 20 aniversario de la organización benéfica para la conservación de la vida silvestre Elephant Family.

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    Eugenia y Beatriz de York

    Las hijas del príncipe Andrés de Inglaterra y Sarah Ferguson aportan su granito de arena a la causa, cada una en su estilo. Eugenia, por ejemplo, es embajadora de la organización Project Zero, que protege el medio ambiente y concretamente los océanos. Al igual que su tío, el Rey, la princesa está muy concienciada con la necesidad de reducir el uso de plásticos y tanto ella como su marido, Jack Brooksbank, lo hacen en su día a día. "Toda mi casa es anti-plástico ahora, y Jack y yo queríamos que nuestra boda fuera así también", dijo en una entrevista en la revista Vogue. Su hermana sigue su ejemplo, pero a través de sus estilismos, utilizando calzado vegano y de firmas eco. Además, en su boda, quiso lanzar un mensaje de reciclaje luciendo un vestido que fue de Isabel II y que Beatriz reformó para darle el "sí, quiero" a Edoardo Mapelli.

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    Príncipe Harry

    Siguiendo el ejemplo de su madre, Lady Di, el duque de Sussex colabora con distintas causas humanitarias y sociales. Una de ellas es la lucha contra las minas antipersonas y está muy involucrado en la organización The Halo Trust, que trabaja para eliminar los artefactos que aún quedan enterrados en muchos países que han sufrido conflictos bélicos. En 2020, antes de abandonar definitivamente sus deberes oficiales, Harry y su esposa viajaron a África donde repitió una de las míticas imágenes de su madre, paseando por un campo de minas en Angola, y agradeció su incansable trabajo a las personas que trabajan en este proyecto. Además, el marido de Meghan Markle también trata de reducir el uso de plásticos en su vida diaria y durante una visita a un hotel en Roma sugirió a sus responsables que trataran de no abusar de este material.

    En este sentido, el año pasado Harry participó en la campaña de Travalyst, una ONG que promueve el ecoturismo. Se convirtió en actor por un día para llamar la atención sobre la necesidad de cambiar el impacto del turismo y mostrando cómo se puede ser más responsable con el medioambiente.

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    Guillermo y Kate de Gales

    El Príncipe de Gales es el impulsor del Premio Earthshot, que creó en 2020 y que premia con 50 millones de euros a personas o proyectos que luchan contra la crisis climática en cinco ámbitos: proteger y recuperar la naturaleza, limpiar el aire, devolverles la vida a los mares, construir un mundo sin residuos y solucionar el problema del clima. Guillermo, siempre acompañado de su esposa, Kate, preside cada año esta gala que este 2023 tendrá lugar en el mes de noviembre, en Singapur. En el vídeo de presentación de estos galardones, Guillermo explicaba así las razones de su compromiso: "La idea es unir a las mejores mentes, a las mejores soluciones y darles alas para atajar algunos de los desafíos medioambientales más importantes del mundo. Los próximos diez años son críticos para materializar el cambio. El tiempo es oro, por eso creemos que este premio internacional tan ambicioso es la única manera que tenemos de seguir avanzando".

    El pasado 1 de agosto, en un acto para promocionar Earthshot, el príncipe se puso el delantal para vender hamburguesas veganas en un food truck. Estaban elaboradas con verduras cultivadas en los invernaderos modulares; las cocinaron en una de las estufas portátiles de combustión limpia y las sirvieron en envases biodegradables para alimentos elaborados con algas y extractos de plantas. Eco 100%.

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    Mary de Dinamarca

    La princesa heredera de Dinamarca es otra de las grandes embajadoras de la moda sostenible y lo demuestra reciclando una y otra vez las prendas de su armario. Ella misma lo explicaba así en la Cumbre de Moda de Copenhague, que preside cada año, donde aseguraba que era fan de las prendas vintage. "Reciclo la ropa no solo para los actos oficiales, sino también en mi vida privada. Compro prendas vintage, hago que me arreglen la ropa y la reinvento", dijo. De hecho, el vestido que luce en esta foto pertenece a un viaje a Países Bajos donde recuperó un diseño de Temperley London que había estrenado en 2016. El original era largo, de gala, pero Mary lo había transformado oportunamente en uno de cóctel para alagar su vida. Lo ha hecho en más ocasiones.

    No sólo ahorra en ropa, también limita el consumo de agua y electricidad. "Tenemos que trabajar juntos para crear un futuro sostenible. Creo que es la primera vez que se habla del hecho de que el futuro de la Tierra está en nuestras manos, en las de las generaciones actuales, y somos más conscientes de que el planeta lo tenemos en préstamo hasta que las siguientes generaciones se queden a cargo de él. No hay tiempo que perder.El cambio beneficiará a todos", ha confesado.

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