"Desde África hasta España, cada bordado cuenta una historia única", asegura Lola González Escudero. Al hilvanar, se cosen "sus raíces y su cultura". Y esta sevillana ha logrado entrelazar costuras, viajes y sostenibilidad para crear su marca Enaguas.
El compromiso con el medio ambiente y la pasión por la moda ética conquistaron su corazón y, de ahí, que en su firma el respeto por el planeta y el bienestar social sean fundamentales. Su nombre, además, no deja indiferente: Enaguas no ha sido una elección aleatoria. Para González tiene un significado especial y con el objetivo de entenderlo es preciso remontarse a sus raíces y a la tradición familiar.
"Enaguas significa 'prenda interior femenina' y es una palabra folclórica del sur de España. Nuestras abuelas solían llevarla y, por eso, el nombre de nuestra marca es un pequeño homenaje para ellas", explica González. Una palabra que para la sevillana evoca tradición, feminidad y autenticidad.
Moda y sostenibilidad
Desde sus inicios, Enaguas ha sido más que una marca de moda. Se define como un proyecto con un propósito claro: promover la moda sostenible y ética, mientras se rescatan y valoran las tradiciones artesanales y se colabora con mujeres en riesgo de exclusión social.
"Enaguas se distingue por honrar la tradición artesanal y el profundo conocimiento de técnicas ancestrales de tejido. Es una celebración del arte del trabajo manual", afirma la sevillana.
La sostenibilidad es la base de cada fase de producción de la marca. Desde la elección de los materiales hasta el proceso de fabricación, Enaguas se compromete a reducir su impacto ambiental y social.
"La conexión con la naturaleza y sus elementos es un pilar fundamental en el ADN de la marca. Cada acción está intrínsecamente ligada al mundo natural que le rodea y se hace un esfuerzo por honrar y preservar esta relación", indica la fundadora.
Emplean materiales orgánicos como el algodón y el bogolán africano, adquirido durante los viajes de la sevillana a destinos como Mauritania y Senegal. "Utilizamos algodón producido en telares antiguos, bogolán teñido y pintado, y tejidos teñidos a mano con técnicas ancestrales. El motivo es rescatar la autenticidad y el valor único de cada pieza, fusionando la maestría artesanal con una cuidadosa selección de tejidos", explica González.
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Pero la sostenibilidad de Enaguas va más allá de los materiales utilizados. La firma está comprometida con minimizar el desperdicio y reducir su huella ambiental en todas las etapas de producción. Con la creación de colecciones limitadas y el uso de técnicas de bajo consumo de agua en el proceso de teñido, la marca adopta una filosofía de slow fashion, que promueve un consumo consciente y responsable.
Historias de muejeres
Con una producción artesanal en talleres locales de Sevilla, Enaguas también mantiene una estrecha colaboración con mujeres en riesgo de exclusión social para rescatar y valorar artesanías añejas.
"Cuando comencé con el proyecto, recuerdo que contacté con vecinas de mi pueblo que tenían trayectoria y conocimientos en costura. Entre ellas, Loli me comentó que acababa de crear una cooperativa de mujeres en el barrio de las Tres Mil Viviendas de Sevilla. Uno de los barrios más desfavorecidos de España. Me resultó muy interesante y desde entonces realizamos nuestras producciones juntas", cuenta González.
Dejando al margen el aumento de producción, ahora, la firma sevillana "busca contar historias de las generaciones de muchas mujeres" con el objetivo de fomentar una comunidad participativa en el intercambio de conocimientos e inspiración. Una acción que persiguen a través de sus colecciones sostenibles y éticas, donde González y su equipo demuestran que la moda puede ser bonita, ética y responsable al mismo tiempo.