Hace tres años, nacía ENCLAVE ODS con el objetivo de ser una nueva apuesta informativa en sostenibilidad y derechos humanos. Además, se iniciaba de la mejor de las maneras, promoviendo perfiles de jóvenes referentes de cada uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Ahora, en su tercer aniversario, busca recordar aquellas voces para conocer cómo su situación actual y cómo evolucionan los objetivos en cuestión.
En esta ocasión, volvemos a hablar con Laura Reboul (Madrid, 1997). En aquel momento era responsable del programa de voluntarios de Greenpeace, donde demostró que la juventud no era un impedimento y que con ganas e interés todo era posible. Tres años después, cuenta orgullosa que es "oficialmente ambientóloga" y se encuentra terminando su máster en Ciencias Agroambientales.
Además de seguir con sus estudios, trabaja como técnica en el área de Acción Climática y Transición Ecológica Justa en UGT. Allí, su labor se centra en proyectos que buscan promover la sostenibilidad y la justicia climática y, colaborando con instituciones públicas, explica, "formar a profesionales en competencia verdes y crear materiales de divulgación y proyectos que faciliten una transición ecológica justa y efectiva".
Pero estudiar un máster y trabajar al mismo tiempo seguía quedándose corto para Reboul, así que también ha decidido continuar trabajando con Greenpeace. Para ella, esta organización es ya una parte fundamental de su vida, porque, cuenta, le "ha visto crecer como activista". Y puntualiza: "Es mi casa".
Aunque su vínculo con esta iniciativa no ha cambiado "en absoluto" en los últimos tres años, sí lo ha hecho su rol. Ahora se centra, indica, en "preparar a personas que quieren pasar a la acción y comenzar su camino en el activismo, dotándolas de las herramientas necesarias para llevar a cabo propuestas y acciones". Un papel que, dice, disfrutar "muchísimo".
Y es que, asegura, si algo ha tenido claro es que su trayectoria profesional debía centrarse en acercar la crisis climática y ecosocial a la sociedad, con el objetivo de construir cambios reales.
Los ecosistemas terrestres
Como agente verificada de información sobre el clima, gracias a su participación en un programa de las Naciones Unidas junto con TikTok, Reboul identifica la pérdida de biodiversidad como la mayor amenaza para los ecosistemas terrestres, porque, explica, "están desapareciendo especies y los hábitats donde viven se están degradando".
De este modo, se crea una situación crítica, ya que, como señala la activista, "nos proporcionan cosas tan básicas como el aire, limpio, el agua potable y los alimentos que comemos, además de ayudar a regular el clima". En definitiva, resume, "lo que afecta directamente a nuestra calidad de vida".
Pero para explicarlo mejor, recurre a un ejemplo: "Imaginemos que los ecosistemas son como una receta de cocina donde cada ingrediente es fundamental para preparar el planto. Si empezamos a quitar ingredientes, el resultado ya no será igual y, si falta muchos, el plato se vuelve incomible".
Y lo relaciona: "Lo mismo ocurre con los ecosistemas: cada especie cumple un papel esencial. Si desaparecen demasiadas, todo el equilibrio se rompe, y ya estamos viendo problemas como la falta de agua limpia, la reducción de cultivos o un clima más extremo".
Porque, indica, "durante mucho tiempo hemos tratado los recursos naturales como si fueran ilimitados, pero no lo son". De hecho, explica, "en España, el 45% de los servicios que nos ofrecen los ecosistemas están en peligro, lo que afecta directamente a cosas tan importantes como la reducción de alimentos o el acceso al agua".
Las pequeñas acciones
Pero ¿qué se puede hacer para evitar la pérdida de biodiversidad? Reboul apuesta por "cambiar pequeños hábitos en nuestro día a día", como puede ser, señala, "elegir productos que no fomentan la deforestación, consumir menos carne, apoyar productos locales y sostenibles o reducir el uso de plásticos".
Subraya la importancia de la educación para exigir cambios políticos que protejan el entorno. Para ello, esta joven activista 'pone su semilla' trabajando con educadora ambiental en huertos escolares, donde tiene la oportunidad de enseñar a los más pequeños los problemas ambientales o la necesidad de los ODS.
Y pese a que en aquella entrevista de 2021 comentaba que los Objetivos de Desarrollo Sostenible no eran muy populares, ahora, asegura, "son mucho más conocidos que antes". Pero matiza que "no en profundidad". Y lo explica: "Estamos viviendo un momento de polarización social y política, donde términos como Agenda 2030 se han utilizado de manera negativa, lo que ha generado desinformación y rechazo social".
Pero la cuestión no queda ahí y señala: "Muchas personas no solo critican los ODS, sino que también niegan la existencia de problemas como el cambio climático. Los comentarios de odio o teorías de conspiración son casi una constante en mi TikTok cuando trato de estos temas".
Por ese motivo, Reboul considera fundamental educar a los niños, porque, dice, "son el futuro". Sin embargo, también sigue manteniendo sus declaraciones pasadas: "Concienciar a las personas a las personas adultas es vital porque es ahora cuando se deben tomar las decisiones que determinarán nuestro futuro".
"Ya no hablamos de 'solucionar' la crisis climática, sino de mitigar sus efectos y adaptarnos a los que ya es inevitable", asegura. Y se pregunta: "¿Qué vamos a hacer en los próximos 6-8 años antes de llegar a un punto de no retorno para evitar que esas consecuencias sena devastadoras?".
De hecho, el Foro Económico Mundial indicaba en su informe de 2024 que España es el segundo país con más desinformación, según las estadísticas. Por ello, confiesa, a pesar de estar haciendo todo lo que está en su mano para contribuir al cambio, sigue "buscando maneras de continuar creciendo, colaborando y ampliando mi alcance, porque este es un camino que solo acaba de empezar".