La Reina Letizia ha participado este viernes en la cuestación de la Cruz Roja como viene siendo tradición. Ha repetido mesa en la Carrera de San Jerónimo, en las inmediaciones del Congreso de los Diputados. Pero por un día, su look, una mini falda con vuelo negra y un cinturón a juego con hebilla plateada de Hugo Boss, que ha combinado con un body blanco de estampado geométrico en negro de Adolfo Domínguez y stilettos a tono, no han sido los protagonistas.
Por allí pasaba Sonia Palacios, una joven publicista que hace un mes dio a luz a su primera hija, Nara. La Reina al verla, se la ha quitado de las manos y ha mostrado su lado más humano y natural, al que pocas veces nos tiene acostumbrados. La joven madre le ha explicado a Doña Letizia que el nombre elegido es en homenaje a la primera capital de Japón. La Reina le ha respondido “que nombre tan bonito, es un ángel”. Se ha interesado también por la edad de la madre (esta le ha respondido que 32 años), a lo que la monarca le ha respondido “aún tienes tiempo de tener otro”. Sonia se ha atrevido a preguntarle si ella no se animaba. Doña Letizia aunque ha mostrado instinto maternal ha sido clara “ Ahora no, pero me quedaba con Nara”.
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La reina emérita doña Sofía ha presidido la mesa de cuestación de la Puerta del Sol. Ha elegido una chaqueta amarillo chillón y pantalón negro que ha combinado con unos elegantes complementos del mismo color. Un año más a esta mesa se han acercado muchos donantes, entre ellos numerosos escolares de uniforme y no han fallado varios miembros de la Asociación de Humoristas Españoles, entre los que se encontraba Bigote Arrocet, pareja de la presentadora María Teresa Campos. La Cruz Roja, este año ha instalado más de cien mesas en los puntos más estratégicos de la Comunidad de Madrid y dedicará los beneficios obtenidos a las personas refugiadas en Europa.