Mientras este lunes se celebraba el Pleno de la 'desconexión' en Cataluña, Mariano Rajoy se ha puesto en contacto con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y le ha convocado este martes en la Moncloa para explicarle los pasos que va a dar para inhabilitar el desafío independentista. El presidente del Gobierno ha hecho una declaración pública desde Béjar (Salamanca), donde se encontraba este lunes, y ha contestado tajantemente al desafío secesionista: "Ni Cataluña se va a desconectar de ningún sitio ni se va a producir ninguna fractura. Nadie escogerá ni renunciará a su nacionalidad: española y europea".
El líder de los socialistas comunicaba, a la misma hora que el presidente del Gobierno, su apoyo al recurso de inconstitucionalidad anunciado por Rajoy. "La mayoría de los catalanes no quieren la secesión. Violar la ley es renunciar a la democracia. Quienes hoy han decidido situarse fuera de la ley, han asumido una grandísima responsabilidad", aseguró en una comparecencia pública desde la sede de Ferraz.
El jefe del Ejecutivo ha anunciado que pedirá este lunes, con carácter de urgencia, un dictamen al Consejo de Estado que avale el recurso que presentarán ante el Tribunal Constitucional para que, a su vez, convoque un Pleno extraordinario y desactive la moción independentista. Con ese informe, que estará en manos del Ejecutivo en veinticuatro horas, el presidente del Gobierno convocará un Consejo de Ministros extraordinario que se celebrará el miércoles por la mañana para aprobar el recurso de inconstitucionalidad en el que se pedirá al TC que suspenda esta resolución independentista.
Será el Tribunal Constitucional el órgano que deberá suspender la moción rupturista. Cuando celebre su Pleno y se apruebe la petición gubernamental será como si no hubiese existido nunca el Pleno que se celebra hoy y nadie se podrá saltar su resolucióhn: ninguna institución ni ninguna persona. Si esto ocurre, como ya han adelantado los diputados de Junts pel Sí y la CUP, el Gobierno “actuará con proporcionalidad”. Solo le quedaría aplicar el artículo 155, suspender la autonomía de Cataluña.
Mariano Rajoy mantendrá informados a los demás líderes constitucionalistas como Albert Rivera de los pasos que va a dar, pero todavía no hay una confirmación de visitarlo a la Moncloa. Antes de terminar su declaración, el líder de los populares ha vuelto a insistir en que pondrá en marcha "todos los mecanismos" para que "nadie pueda arrogarse a poderes ilimitados y sin control fuera de la Democracia y de la ley".
Así, se ha comprometido a "defender y preservar" la Democracia en toda España, "cuyo principal fundamento es que la soberanía nacional reside en el conjunto de la Nación".