Podemos tenía dos ases en la manga para su entrada en el Congreso: uno para abrir el telón y otro para cerrarlo. A las diez de la mañana, aparecía Carolina Bescansa con su hijo Diego, al que ha hecho partícipe de su nombramiento en la cámara. Ha subido con él a la tribuna para votar e incluso lo ha amamantado en el escaño.
La segunda baza para acaparar el protagonismo era una coletilla con la que diferenciar la jura de sus diputados de la del resto: “Prometo acatar la Constitución y trabajar para cambiarla”. Una vez pronunciada esta frase, añadían un comentario personal para terminar recitando un broche común: “Nunca más un país sin su gente y sin sus pueblos”.
Esta oportunidad para la creatividad ha supuesto que muchos de los diputados de Podemos tuvieran que prometer su cargo leyendo un papelito y que, en muchos casos, sus voces fueran acalladas por el murmullo general. Incluso, Alicia Sánchez-Camacho, secretaria de la Mesa, ha llegado a interrumpir con dureza a los diputados de Podemos cuando éstos innovaban en su mensaje.
Pablo Iglesias: el líder de Podemos ha sido uno de los más escuetos de su partido. “Prometo acatar esta Constitución y trabajar para cambiarla”, pero su jura ha sido una de las más llamativas. Iglesias también se ha expresado en lengua de signos.
Más tarde, a la salida del Congreso, durante una foto de grupo, el secretario general de Podemos no ha podido contener la emoción y ha soltado algunas lágrimas.
Íñigo Errejón: “Por la soberanía del pueblo, por una España nueva, per la fraternitat entre els pobres. Porque fueron somos, porque somos serán”. Dijo a la vez que levantaba el puño. El número dos se ha quejado de que no "hubiera sonido" en las promesas.
Marcelo Expósito: "Que la gente mande y el Gobierno obedezca". El diputado de En Comú Podem aseguró al asumir su nuevo cargo como secretario cuarto de la Mesa del Congreso que promete "trabajar en esta Cámara por un proceso que reconozca la diversidad y la soberanía y que facilite la relación fraterna entre los pueblos del Estado".
Rafael Mayoral: "Viva España, viva el pueblo, vivan los trabajadores". El diputado por Madrid y secretario de Relaciones con la Sociedad Civil aprovechó para reivindicar la lucha de los trabajadores.
Alberto Rodríguez: "Aunque a algunos parece que les molesta que estemos aquí, yo prometo acatar la Constitución y trabajar para cambiarla". El diputado por Santa Cruz de Tenerife respondía así a las críticas de la bancada popular a las fórmulas utilizadas por los miembros de la formación morada. "¡Que sí, que ya te hemos oído! ¡Venga, hombre!", espetaron algunos diputados del PP.
La innovación en la promesa, tradición de Podemos
El partido de Iglesias ha convertido la reinvención de la jura en una tradición. Ya utilizaron el desmarque frente al rezo convencional en la constitución de la Asamblea de Madrid y en el Ayuntamiento de la capital.
Los diputados regionales prometieron su cargo “hasta poner las instituciones al servicio de la gente”. Por otro lado, en el Ayuntamiento, Guillermo Zapata, apartado de la concejalía de Cultura por sus improcedentes tuits respecto al holocausto y el terrorismo, hizo de lo viejo lo nuevo y prometió diciendo: “¡Omnia sunt communia!” -todo es común-.
La variedad del Senado: del embarazo a la república catalana
En la Cámara alta, los parlamentarios del PP también han huido de la cotidiana jura o promesa para añadir coletillas personales.
Pedro José Pérez ha dicho: "Sin imperativo de ningún tipo, con convicción personal, para defenderla (la Constitución) de los que la utilizan". El líder del PP en Cataluña, García Albiol ha jurado como “catalán y orgulloso español”.
Algunos de los representantes de Democràcia i Llibertat y ERC han ido más allá que los de Podemos y han dicho acatar la Carta Magna sólo hasta la constitución de una república catalana.
Laura Berja: la socialista ha dejado uno de los momentos de la jornada. Embarazada, ha jurado la Constitución con una mano en la tripa y ha dicho: "Sí, prometemos", en referencia a su hijo a punto de nacer, a lo que ha respondido el presidente de la Cámara: "Doble enhorabuena".
Virginia Felipe, de Podemos, ha utilizado su promesa en el cargo para lanzar una crítica a las barreras arquitectónicas que dificultan su desplazamiento -en silla de ruedas- por la Cámara.