Arabia Saudí sigue esperando a don Felipe y doña Letizia a pesar de que Madrid ha cancelado subrepticiamente el viaje proyectado a instancias de Podemos.
Así lo ha confirmado a este periódico el embajador saudí en España, el príncipe Mansur bin Khalid bin Abdulá al-Farhan al-Saud. “Nuestro Gobierno aún da la bienvenida al rey en la segunda mitad de febrero”, ha señalado este domingo el príncipe, que junto a los representantes de Riad en Washington DC y en Londres es uno de los tres únicos miembros de la familia real saudí en misión diplomática. “Esperamos que el lado español lo confirme. Por nuestra parte, ya ha sido agendado”.
El príncipe Mansur aún no ha recibido noticia ni del ministerio de Asuntos Exteriores ni de la Casa del Rey desde que el pasado 12 de diciembre anunció en TVE que los reyes de España visitarían su país entre los días 16 y el 18 de febrero. La diplomacia española llevaba todo el 2015 preparando una visita que estaba “paralizada por las elecciones en España” mientras veía exasperada cómo estaba “haciendo los deberes” Francia, una de las archienemigas a la hora de competir por los contratos con el reino del desierto.
Así, el primer ministro francés, Manuel Valls, y su ministro de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, fueron a Riad mientras que España todo lo que podía hacer era apuntarse al viaje de Juan Carlos I de tapadillo en noviembre, según fuentes diplomáticas. Para más inri, el presidente Hollande ha invitado al rey Salman a realizar un viaje oficial a Francia.
Un viaje fantasma
¿Viajar o no viajar al más alto nivel? Ésa era la hamletiana cuestión de Madrid, que seguía sin confirmar oficialmente el viaje cuando el pasado 2 de enero el Gobierno saudí decapitó a 47 personas. Había muchos terroristas pero también inocentes entre los ajusticiados. Por ejemplo el clérigo chii Al-Nimr, cuyo único crimen había sido criticar a los Al Saud. El 8 de enero, Podemos pidió a través de un comunicado que los reyes no viajaran a un país en el que, además de las mencionadas crucifixiones (así se denomina en Arabia la pena capital por decapitación) “las mujeres sufren una discriminación sistemática cotidiana y los defensores y defensoras de los derechos humanos sufren una represión contínua”.
Tras mes y medio de silencio administrativo por parte de Madrid, el diario El País ha actuado este domingo de portavoz oficioso del ministerio de Asuntos Exteriores para informar de la suspensión del viaje de los reyes a Riad “por la situación de España”.
¿Se puede suspender un viaje que oficialmente no ha sido anunciado? EL ESPAÑOL no ha podido recabar este domingo la línea oficial de Exteriores, pero fuentes conocedoras de este proyecto de viaje señalan: “Antes de anunciar oficialmente un viaje se tiene que preparar, y en eso estaba el ministerio. El viaje se sigue preparando pero para otra fecha teniendo en cuenta la situación política interna. Se efectuará definitivamente cuando haya gobierno en España”. Esta es la línea oficial de la Casa del Rey: “Un viaje no anunciado oficialmente no existe”. Zarzuela añade: “La política exterior corresponde constitucionalmente al Gobierno”.
La victoria de Podemos
Para el Gobierno saudí la nota de El País no es suficiente, pero para Podemos sí. Este domingo, Pablo Iglesias se ha apresurado a felicitar a su “futuro ministro” de Exteriores Pablo Bustinduy y a todo el equipo internacional por 'supuesta' suspensión del 'supuestamente inexistente' viaje. Bustinduy, por su parte, ha escrito: “Hay cosas que ya no son como antes, también en nuestra política exterior”.
Según una portavoz de Podemos, ésta es la postura oficial de la formación morada ante los hechos consumados de que el 16 de febrero don Felipe y doña Letizia no estarán en Riad. “Celebramos la decisión del Gobierno y de la Casa Real de no realizar ese viaje. Nos parece una nueva demostración de que desde que llegamos las cosas están cambiando y de la importancia de mostrar a la ciudadanía determinados asuntos. Ahora nos gustaría ver un paso más: una exhaustiva rendición de cuentas sobre la venta de armas españolas a Arabia Saudí”.
Las relaciones entre Podemos y Arabia Saudí se torcieron públicamente después de los atentados de París el 13 de diciembre, cuando 127 personas fueron asesinadas y 180 heridas. El 16 de noviembre, en La Sexta Noche, Iglesias afirmó: “España vende armas a Arabia Saudí, que financia a ISIS”. Una semana más tarde, la embajada saudí en Madrid emitió un comunicado de tres páginas para “esclarecer los hechos reales ante estas falsas e irresponsables acusaciones”.
Contratos con Arabia y con Irán
Madrid se tienta la ropa ante una potencial escaramuza diplomática que coincide con la rehabilitación internacional de Irán, el acérrimo enemigo de Arabia Saudí. Teherán ha comenzado a regresar este fin de semana a la comunidad de naciones al aceptar el uso de la energía atómica sólo para fines pacíficos. A Riad le escuece especialmente que sus tradicionales socios occidentales se vuelquen ahora con Teherán, que esta misma semana ha desvelado sus planes para construir una refinería de petróleo en España para procesar 200.000 barriles al día. Empresas españolas están negociando también la modernización del metro de Teherán.
Pero estas posibilidades económicas con Irán palidecen comparadas con los “espectaculares contratos” de España con Arabia Saudí, donde 5.000 españoles viven y trabajan, según fuentes diplomáticas. “El viaje de los Reyes se hará con toda seguridad, España se juega demasiado”, señalan estas fuentes, que destacan cómo Arabia Saudí se convierte cada vez más en la mayor patata caliente de la diplomacia occidental: cómo equilibrar derechos humanos con intereses económicos.
Además del famoso contrato del AVE a la Meca, empresas españolas trabajan en el metro de Riad y aspiran a venderle corbetas al reino saudí, como es el caso de Navantia. Dragados, Tipsa, OHL, CAF y muchas otras compañías españolas tienen la vista puesta en las vías de tren de la provincia oriental así como en innumerables proyectos, desde desaladoras hasta hospitales.
Felipe VI y MBS
Las mismas fuentes aseguran que la ambición de la diplomacia española es que el nuevo rey de España sea capaz de establecer unas relaciones con el reino similares a las que tiene su padre, el rey emérito. En el caso de Felipe VI, el objetivo es Mohammed bin Salman (MBS), de 30 años, el hijo favorito del octogenario rey Salman. MBS, según denominación interna de diplomáticos, acumula títulos: ministro de Defensa; jefe de la Corte Real y segundo en la sucesión al trono. Pero el más importante no está escrito: es el auténtico hombre fuerte del reino, por encima de su tío, el príncipe heredero, Mohammed bin Nayef (MBN).
En su penúltimo número, The Economist lo denomina “un joven príncipe con mucha prisa” y tras entrevistarlo concluye que la nueva generación de royals saudíes no están por la apertura política. Según el prestigioso semanario británico, el joven MBS tiene ambiciones “de reforma económica pero no política”. En estos momentos, la represión en Arabia es mayor que en ningún otro momento de su historia.
Para ayudar a España en las gestiones con Arabia Saudí, la diplomacia y la Casa del Rey siguen teniendo al mejor de los facilitadores: Mohammed Kayali, el empresario hispano-sirio que acompañó a Juan Carlos I a Botsuana en la primavera de 2012. Hombre de absoluta confianza del rey Salman, Kayali mantiene una “estrechísima” relación con algunos de sus hijos, entre ellos MBS, al que la diplomacia de nuestro país describe como “un gran conocedor de España”.
Una agenda complicada
La situación política interna de España ha sido la mejor de las excusas para dejar en el limbo un viaje complicado como el de Riad, según fuentes diplomáticas, que destacan cómo Madrid ha intentado contentar a los saudíes simplemente posponiendo el viaje, y a los españoles que se identifican con Podemos cancelando a corto plazo una visita que chirría tan poco tiempo después de las crucifixiones. Las mismas fuentes diplomáticas dudan sin embargo de que peligre el viaje de Estado de los Reyes a Reino Unido entre el 8 y el 10 de marzo. El comunicado oficial del viaje a Londres se emitió el 18 de diciembre, seis días después de que el príncipe Mansur anunciara el de Riad en TVE.
Fuentes diplomáticas europeas confirman las dificultades que existen en la actualidad para cerrar "cualquier día" con la Casa del Rey. Lo que prima es la formación de Gobierno. Hay un tercer gran viaje al extranjero, el de Japón en abril, que podría también coincidir con una segunda ronda de elecciones si antes no hay inquilino seguro en La Moncloa.