El Rey iniciará la segunda ronda sin nadie dispuesto a afrontar la investidura
El PSOE insiste en que le toca a "una persona" del PP y Rajoy pide "un presidente con dignidad".
24 enero, 2016 02:18Noticias relacionadas
El Rey afronta la segunda ronda de contactos con los líderes de los grupos políticos con representación parlamentaria sin la voluntad de ningún candidato para afrontar la primera sesión de investidura. El endiablado tablero político que salió del 20D ha provocado algo insólito en la historia de la Democracia española: ninguno de los políticos con más apoyos quiere solicitar la confianza a la Cámara porque ninguno la tiene. Ni Mariano Rajoy, que contó con el respaldo de 7,3 millones de votos; ni Pedro Sánchez, que obtuvo el apoyo de 5,5 millones de ciudadanos, pretende aceptar la propuesta que tiene que hacer el monarca cuando vuelva a reunirse con todos los portavoces.
La sorpresa que el viernes produjo en la dirección del PSOE el paso atrás de Mariano Rajoy, que hasta ese mismo día estaba dispuesto a aceptar el encargo del Rey, provocó que la dirección nacional de los socialistas enviasen este sábado por la mañana un comunicado con el que se niegan a seguir el juego del PP, que pasan el turno a los socialistas para ganar tiempo y obligar a Pedro Sánchez a retratarse ante la audaz propuesta de Podemos. El documento escrito en Ferraz recoge que, de la nueva ronda de consultas que abre el Rey, “debería salir, de nuevo, el encargo de formar gobierno a una persona propuesta por el primer partido en la Cámara”.
Ni la Constitución ni el reglamento de las Cortes Generales recoge qué debe hacer el Rey si el candidato que propone declina la oferta. "Lo natural sería que el Rey volviera a proponer a Mariano Rajoy, ya que es la persona que lidera la fuerza más votada", insisten fuentes parlamentarias. De hecho, destacan el detalle de que Zarzuela propuso candidato "y fue Rajoy el que declinó la oferta", no al revés. Históricos dirigentes socialistas y algún que otro popular critican la "cobardía" del líder popular de enfrentarse a la sesión de investidura que podría suponer el final de su carrera política, ya que sería la escenificación de su soledad. "Al Parlamento se va a morir, como hemos ido todos", reconoce un dirigente que sufrió sudores y lágrimas para conseguir la confianza de la Cámara.
La jugada con la que Rajoy se quitó el foco de encima fue la oferta que Pablo Iglesias le comunicó al Rey: si Pedro Sánchez lo acepta como vicepresidente, le da su apoyo a la investidura. Con este órdago que Podemos lanzó a los socialistas, el líder del PP declinó la oferta que le puso encima de la mesa el monarca horas después. Ahora, el mensaje de Rajoy era que sería “un fraude” ir a la sesión de investidura sin contar con los avales suficientes para salir investido como presidente del Gobierno.
La pelota entonces se colocó en el tejado de Pedro Sánchez, que se resiste a recogerla. “El PSOE no va a emprender negociaciones con otras fuerzas políticas para intentar fraguar una alternativa de Gobierno estable y, mucho menos, cuando se plantean desde el chantaje”, recoge el comunicado lanzado este sábado por la mañana. Sin embargo, el documento no hace referencia alguna a qué hará Pedro Sánchez si Felipe VI le propone intentar formar gobierno.
Si el Rey lo propone, acepta
Desde el entorno del secretario general del PSOE se ha filtrado durante la tarde de este sábado que Sánchez le dirá la Rey que debería proponer a una persona del Partido Popular. Sin embargo, si el monarca decide proponer al socialista porque Mariano Rajoy ya declinó la oferta el viernes y casi con toda probabilidad llegará al final de la segunda vuelta con el mismo número de avales, Pedro Sánchez aceptaría “por responsabilidad” la propuesta del monarca y se sometería a la sesión de investidura que ha declinado el líder del PP. Fuentes cercanas al secretario general aseguran que esta afirmación únicamente se traduce en "ser coherentes con las críticas que le ha lanzado a Rajoy". Nadie apuesta por la posibilidad de que el socialista llegue a la Moncloa con más apoyos que los conservadores simplemente porque "la propuesta de Podemos ha cerrado toda posibilidad de que el pacto pueda producirse".
Los socialistas más reacios a un acuerdo de gobernabilidad con Podemos aseguran a EL ESPAÑOL que hubo un “cabreo máximo” internamente al escuchar la rueda de prensa que ofreció Sánchez tras su visita a Felipe VI. “He entrado sin nada y he salido con un gobierno ya hecho”, confesó el secretario general de los socialistas cuando descubrió la oferta que Pablo Iglesias le había dejado encima de la mesa del Rey. Hubo quien reprochó a Sánchez que tendiera la mano “a los radicales” y pesos pesados del partido como Alfredo Pérez Rubalcaba o Eduardo Madina empezaron a calificar el pacto de “chantaje”.
Horas después, la dirección nacional apagaba el fuego interno con el comunicado que corregía las palabras del secretario general y tildaba de “chantaje” la propuesta de Podemos, sin citar al partido liderado por Pablo Iglesias. El PSOE deja claro que “no negociará esta semana un posible Gobierno”, aunque ya ha abierto la ronda de contactos. El primero que dejó un mensaje en el teléfono de Pedro Sánchez para hablar fue Pablo Iglesias, pero el socialista ha optado por ponerse en contacto con Albert Rivera en primer lugar para intentar desmarcarse de los tiempos que dicta Podemos.
PSOE y PP se han cruzado duros reproches durante este sábado. Los socialistas cargan contra Mariano Rajoy y le dicen que es “inaceptable” que rechace presentarse a la investidura. “Solo es comprensible desde la complicada situación judicial que afronta su partido, imputado estos días por corrupción”. El líder del PP, que reaparecía este sábado arropado por la cúpula y por militantes en Córdoba, volvía a tender la mano al PSOE para formar una gran coalición porque, si no, la única salida que tiene Sánchez es pactar con “los radicales” y “no todo vale en la vida”.
“Presidente con dignidad”
Para el líder del PP, Sánchez no habla con él porque quiere un Ejecutivo con Podemos, IU y “todos” los partidos independentistas. “Ya están negociando”, aseguró, y puso como ejemplo la cesión de senadores a ERC y CDC. “Sería un Gobierno a las órdenes de Podemos, hipotecado y humillado. Un desastre para España. Para ser presidente de España no basta con humillarse ni hipotecarse. Necesitamos un presidente con dignidad”.
La Constitución no recoge qué debe hacer el Rey en la segunda vuelta si el candidato más votado declinó la oferta en la primera. Si Sánchez no llega con el apoyo de Podemos o de Ciudadanos, todo apunta a que el monarca propondrá a Mariano Rajoy, que lideró la lista más votada. El tiempo para convocar nuevas elecciones no empieza a correr hasta que no se celebra precisamente esa primera sesión de investidura a la que todos los que quieren ser presidente no se atreven a enfrentarse. "¿Hasta cuándo va a durar esta legislatura en funciones, que es lo que quiere Rajoy?", se preguntan en círculos socialistas y populares. El misterio de qué hará el monarca sigue sin resolverse.