Niebla, pesadumbre y bloqueo en el inicio de la segunda ronda de consultas reales. Serio ha encontrado al Rey Pedro Quevedo (Nueva Canarias, izquierda nacionalista) a pesar del toque personal que Felipe VI ha dado a este segundo asalto político: el monarca ha esperado él mismo en el salón de audiencias a unos representantes que ya conoce. De esta manera, les ha evitado la breve (y a veces embarazosa) estancia en soledad frente al tapiz y los flashes mientras el ayudante militar lo anuncia formalmente.
Cercanía real en un momento de impasse político que muchos, como el propio Quevedo, atribuyen al filibusterismo de Mariano Rajoy tras su decisión el pasado viernes de declinar la nominación de Felipe VI para la investidura. Más acercamiento de un Rey “meticuloso y detallista”, según el segundo consultado, Isidro Martínez Oblanca (Foro, socio asturiano del PP), pero cero bromas y unas audiencias mucho más cortas que la semana pasada- apenas media hora- porque ya hay menos de lo que hablar. El tiempo apremia.
Finalmente, Ana Oramas, la veterana diputada de Coalición Canarias (CC) ha cerrado la ronda en la tarde del miércoles con una petición in extremis a un monarca que ha encontrado “expectante” con la situación: que se agoten "todas las vías jurídicas" y que luego se busquen "soluciones políticas" para desatascar un escenario de incertidumbre que este miércoles ha denunciado hasta Ana Patricia Botín, la presidenta del Banco Santander.
Líderes sin apetito electoral
"El país no se puede permitir, porque sería inasumible, tener un Gobierno en funciones porque no haya un candidato con los apoyos suficientes para presentarse a una investidura”, ha subrayado Oramas, que ha defendido la necesidad de que la Abogacía del Estado y los Letrados de las Cortes estudien cómo desbloquear la investidura si no hay candidato posible. No ha descartado Oramas que el Rey encuentre a alguien entre los “líderes políticos” sin apetito electoral inmediato que se preste a desbloquear la investidura.
Para Oramas las cosas han cambiado de plano porque la semana pasada "nos parecía obvio" que Rajoy iba a aceptar. "Hay que encargárselo al señor Rajoy", le ha dicho Quevedo, muy directo, al monarca. Este otro líder nacionalista canario ha sido muy crítico con el “desistimiento” de Rajoy, que ha calificado también de “feo” al rey.
El asturiano Oblanca, que es socio del PP, también ha sugerido que Rajoy debería de aceptar una supuesta segunda nominación incluso si la semana que viene sigue sin conseguir los votos necesarios porque tanto en el Congreso como en el Senado el “bloque constucionalista” es mayoritario.
Desatasco institucional
Todos los consultados han comentado con el rey los “signos preocupantes de la economía” que ha mencionado Oblanca cuando se van a cumplir seis semanas desde que se celebraron las elecciones.
"No sabemos qué es lo que va a hacer, el posible encargo que hará a quién y en qué momento y de qué manera", ha señalado Quevedo en referencia a la importante decisión que Felipe VI tiene que tomar el próximo martes. Dentro y fuera del Congreso se empieza a comentar ya que el tacticismo político puede acabar afectando al prestigio institucional de un rey aún reciente en el trono. No ha ayudado este miércoles al desatasco institucional el último escándalo por corrupción del PP conocido en Valencia.
Ello, aunque Quevedo ha visto más "animado" a Rajoy de cara a aceptar una segunda propuesta real si es que ésta se produce. Este jueves continúa la ronda con Unión del Pueblo Navarro (UPN), Izquierda Unida (IU) y Partido Nacionalista Vasco (PNV).