El caso de los titiriteros refleja la "desproporción” de la ley, según Amnistía Internacional
La ONG critica en su informe anual la limitación de la libertad de expresión en España con los cambios legislativos de 2015 sobre manifestaciones, terrorismo e inmigración.
24 febrero, 2016 01:01Noticias relacionadas
Amnistía Internacional ha publicado su informe anual sobre el estado de los derechos humanos en el mundo y en el apartado dedicado a España destaca que “la libertad de reunión se vio restringida por nuevas disposiciones legislativas”, en referencia a la reforma del Código Penal y la nueva Ley de Seguridad Ciudadana aprobadas en 2015. También denuncia “nuevos casos de malos tratos y un uso excesivo de la fuerza” por parte de la policía.
“Se han aprobado medidas legislativas que han limitado de manera desproporcionada la libertad de expresión y manifestación pacífica. Y se ha hecho oídos sordos a la ONU”, ha criticado Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional. Multas de hasta 30.000 euros para personas que muestren “falta de respeto” o que graben imágenes de agentes de policía en situaciones como las de los antidisturbios aplicando la fuerza. El informe critica unas competencias que considera excesivas otorgadas a las fuerzas de seguridad.
“Lo que ha pasado con los titiriteros detenidos en Madrid acusados de enaltecimiento del terrorismo por el contenido de su espectáculo [en el que exhibieron una pancarta que rezaba 'Gora ETA'] es un ejemplo de cómo la amplia definición de terrorismo puede suponer un límite desproporcionado al derecho a la libertad de expresión”, ha destacado. “La ley antiterrorista empezó en los años 80 y cada vez está más en vigor y más ambigua en materia de derechos humanos”.
Las conocidas como “expulsiones en caliente” de inmigrantes en Ceuta y Melilla además de la desatención sanitaria de 750.000 migrantes en situación irregular son la otra gran preocupación que denuncia Amnistía en España.
“Lamentablemente, lo mismo que aconseja [España] para el exterior no lo sigue dentro”, ha opinado Beltrán. “Una docena de mecanismos de Naciones Unidas han alertado a España por haber legalizado la expulsión sumaria de personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas en las fronteras de Ceuta y Melilla; por no haber regulado el delito de tortura ni desaparición forzada; por haber dejado sin asistencia sanitaria a 750.000 personas en situación irregular”, ha enumerado.
Ha subrayado “el poco compromiso de España con los mecanismos de derechos humanos”. Como ejemplo, una cifra: ha acogido a 18 refugiados llegados a través de Italia o Grecia a pesar de haberse comprometido a más de 17.000, si bien es cierto que en toda la Unión Europea tan sólo se ha reubicado a 598 de los 160.000 que acordaron los Veintiocho.