El PSOE rechaza sentarse con la izquierda por el veto de Podemos a C's

PSOE y Podemos siguen rompiendo puentes. Los socialistas han anunciado este lunes que renuncian a reunirse con Compromís, IU y el partido de Pablo Iglesias debido a que la formación morada no acepta que a este encuentro acuda también Ciudadanos. 

El portavoz parlamentario de Podemos, Iñigo Errejón, ha charlado este lunes con su homólogo del PSOE, Antonio Hernando, para invitarle a esta mesa de negociaciones. Hernando ha declinado la oferta indicando que los equipos de negociación de PSOE y C's se han ratificado en el pacto de El Abrazo. Tienen intención de acudir siempre conjuntamente a todas las reuniones que se celebren a partir de ahora para poder formar cuanto antes un nuevo gobierno.

Ante esta decisión, Errejón le ha señalado a Antonio Hernando que la invitación era únicamente individual para el PSOE. 

Fuentes socialistas han lamentado que Podemos fuera el último partido en sentarse a negociar y el primero en abandonar la mesa de diálogo antes del frustrado debate de investidura de Pedro Sánchez. 

La reunión a cuatro, que incluye a las confluencias En Comú Podem y En Marea, fue promovida hoy por Podemos con la intención de reanudar los contactos para intentar formar un gobierno de izquierda.

Este foro se reunió en dos ocasiones a iniciativa del líder de IU, Alberto Garzón, pero Podemos rompió las negociaciones tras el pacto sellado entre PSOE y Ciudadanos el pasado 24 de febrero. Pese a las posiciones encontradas, el PSOE confía en que Podemos, Compromís, IU y PNV "quieran sumarse con sus aportaciones al acuerdo y a la mayoría de cambio" entablado con los de Albert Rivera.

"Sin el hombre de negro"

Por su parte, el secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, espera que al PSOE "se le quite el miedo" y se sume a la reunión del miércoles sin "su hombre de negro", en referencia a C's. 

"Parece que le ponen un hombre de negro para vigilar que no se salga del guión, y eso empieza a ser 'escamante'", ha sentenciado Pascual, que ha recordado que la mesa a cuatro con los partidos de la izquierda estaba "funcionando bien y era un camino con el respaldo de 11 millones de votantes".