Los protagonistas de 'Cuéntame' habrían utilizado un entramado societario para no tributar en España sus ingresos por la serie de televisión emitida por TVE. Según los datos de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) de la Agencia Tributaria, Imanol Arias habría cometido un fraude de 1,6 millones de euros, mientras que la cuota de Ana Duato ascendería a 800.000 euros.
Estos son los datos que constan en la causa que instruye el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno tras una querella de la Fiscalía Anticorrupción, y que llevó a la detención de cuatro personas vinculadas al despacho Nummaria la semana pasada, dedicado a constituir entramados societarios opacos para defraudar a Hacienda.
Tal y como ha podido saber EL ESPAÑOL, según consta en la querella, la ONIF ha hecho un cálculo inicial del fraude de Imanol Arias de 317.356 euros en el ejercicio 2010; 515.884 euros, en el año 2011; 317.339 euros en el ejercicio 2013; y 497.046 euros en el año 2014, lo que hace un total de 1,6 millones de euros aproximadamente. En la propia querella, la Agencia Tributaria alerta que son datos iniciales que deberán concretarse con la documentación incautada en el registro del despacho.
En el caso de Ana Duato, las cifras calculadas por la Agencia Tributaria que habría dejado de pagar a Hacienda por el Impuesto de Renta de Personas Físicas (IRPF) es de 141.440 en el ejercicio 2010; 311.370 euros en el año 2011; y 341.578 euros en el año 2012, haciendo un total aproximado inicial de 800.000 euros defraudados.
Entramados con testaferros costarricenses
Según recoge la querella, los dos actores habrían utilizado un entramado para evitar tributar en España todos sus ingresos de la serie de televisión, que llevan quince años emitiendo en la cadena pública.
Tanto estos dos clientes del despacho junto a otra treintena que también se encuentran investigados, habrían utilizado estructuras defraudatorias que pasan por crear comunidades de bienes primero y después simular operaciones con Agrupaciones Europeas de Interés Económico (AEIE). Estas agrupaciones no tributan en sociedades sino que tienen que repartir sus beneficios entre sus integrantes.
Y estas integrantes son sociedades británicas limitadas, de las que no se sabe su titularidad, administradas por otras costarricenses, cuyos administradores son testaferros profesionales, y con transferencias a cuentas en Suiza.
Según el reglamento europeo, la finalidad de la agrupación es facilitar y fomentar las actividades económicas de sus miembros mediante la unión de sus recursos, actividades y competencias. Dicha unión debe permitir la obtención de mejores resultados que los que sus miembros lograrían actuando de forma aislada. Si la agrupación obtiene beneficios, éstos se repartirán entre los miembros, pagándose asimismo los impuestos según corresponda. Sus actividades deben estar relacionadas con las actividades económicas de sus miembros, sin que puedan llegar a sustituirlas.
En el caso de los investigados, está AEIE era ficticia desde el momento que la sociedad británica con la que se unían no es más que una sociedad pantalla, administrada por testaferros de Costa Rica. Según la investigación, el despacho constituyó entramados opacos bajo este régimen, dando la inmensa mayoría del peso a las sociedades británicas para no tributar en España. Las sociedades británicas tendrían que haber declarado sus beneficios a su Agencia Tributaria sin embargo las investigaciones iniciales realizadas por la ONIF concluyen que no se ha tributado tampoco allí.
Tampoco declaraban en Inglaterra
Los investigadores tienen localizadas 104 sociedades limitadas británicas, y todas ellas poseen su domicilio en la misma casa familiar y no tienen actividad, por lo que hay indicios racionales de que se tratan de sociedades instrumentales utilizadas únicamente con el objetivo de defraudar a Hacienda. En algunos casos, las autoridades británicas han informado que nunca han declarado en el Reino Unido lo percibido de las entidades en régimen de las AEIE.
Entre los querellados, también aparecen la hermana de Imanol Arias, Ana Isabel Arias Domínguez, y el marido de Ana Duato, Miguel Ángel Bernadeu Maestro. El despacho montaban complejos de sociedades creando en último término una pantalla formal. En el caso de Ana Duato, tenía una sociedad, Gaumukh AEIE, participada por otras sociedades utilizadas a su vez por otras estructuras creadas por el despacho, que son Nevington Limited, a su vez participada por Dudley International S.A. y Hillside Finance S.A. En el caso de la sociedad utilizada por Duato, y constituida en 2007, el administrador único es su marido, y consta como matriz Ganga Proyectos S.L., también de éste.
En el caso de Imanol Arias, la estructura utilizada para ocultar sus ingresos, según la Fiscalía Anticorrupción, es Leitmotif Projects AEIE, participada a su vez por Rosedale Limited, a su vez participada por Aljayma Holding SA. En esta estructura, creada en 2010, aparece como administradora única su hermana. Además, consta como administradora de una de las sociedades otra llamada Kington Management, también de los mismos testaferros de Costa Rica utilizados en varios entramados creados por el despacho investigado.
Este diario ya avanzaba que los dos protagonistas de la serie 'Cuéntame' eran dos de los clientes que han hecho uso de sus servicios. Después de que la Policía registrara el despacho el pasado miércoles, ordenó el bloqueo de una serie de cuentas, entre ellas las de las sociedades de ambos actores. El próximo paso será que el magistrado les cite a declarar en calidad de investigados -antes imputados-.