A partir de ahora, Carmena defenderá su proyecto para Chamartín en medio de un fuego cruzado. Hasta este lunes, la alcaldesa de Madrid tenía un gran escollo enfrente: sin el apoyo de la Comunidad y el ministerio de Fomento no podrán iniciarse las obras para prolongar el Paseo de la Castellana. Ahora tiene dos: el PSOE, su socio para casi todo, le acusa de no tener "hoja de ruta" y de "no tomar las riendas".
Los socialistas han perdido la paciencia en la gestión del que también es su proyecto. Estuvieron en la presentación de Madrid Puerta Norte -así lo han llamado- y, según reveló EL ESPAÑOL, su vieja guardia fue precisamente quien detalló las líneas generales del dibujo del actual Ejecutivo para Chamartín.
Tres bandos en lugar de dos
En la contienda había dos bandos: por un lado, Fomento y Comunidad de Madrid. Por el otro, Carmena y el PSOE, que ha decidido apartarse de la regidora. Aunque la portavoz del partido de Sánchez en Madrid, Purificación Causapié, asegura que siguen apoyando el proyecto, ya rechazan ir de la mano con Ahora Madrid.
Tanto los socialisas como los de Carmena esperan un ministerio de Fomento del 'cambio' para desbloquear la situación porque es el Estado, por medio de Adif, quien posee la mayor parte de los terrenos a edificar, el 64%.
Causapié, que se 'divorció' de la alcaldesa justo antes de las elecciones, le ha pedido explicaciones en el pleno: "Tiene que tomar las riendas. En este proceso de negociación no ha habido liderazgo por parte del Ayuntamiento. Todas las reuniones han sido convocadas por el ministerio y han sido más una estrategia electoral que una verdadera intención de iniciar Chamartín".
Carmena necesita el apoyo de Pastor y Cifuentes
Sin un Gobierno claro a la vista, la puesta en marcha de las grúas se percibe lejana. Tanto los socialistas como Carmena saben que sin el apoyo de la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, y de la ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, no hay acuerdo posible.
Pero ahora la alcaldesa de Madrid tiene que lidiar con una dificultad añadida: la tensa relación que mantiene con el PSOE, hasta ahora único acompañante en su viaje hacia 'Madrid Puerta Norte'.