La desaparición de Diana Quer en la localidad coruñesa de A Pobra do Caramiñal sigue siendo un misterio. Apenas hay pistas que tumben ninguna de las siete hipótesis que la Guardia Civil baraja sobre el caso, pero en las últimas horas hay una que ha cobrado más fuerza: que la joven madrileña de 18 años se subiera a bordo de un coche y se marchase a un punto alejado de las zonas que actualmente se rastrean.
De acuerdo a las pesquisas de la Guardia Civil -la investigación se encuentra bajo secreto de sumario-, Diana Quer podría haberse subido a bordo de un coche cuando volvía a su casa en la madrugada del 21 al 22 de agosto. Por entonces, este municipio de 9.600 habitantes celebraba sus fiestas patronales.
En caso de que se confirmara este extremo, habría que determinar si subió al vehículo por iniciativa propia o contra su voluntad. Por eso es crucial saber con quién estuvo las últimas horas antes de desaparecer.
Según esta información, adelantada por el diario Faro de Vigo, los agentes de la Guardia Civil han rastreado en los últimos días en los bares de copas de otras localidades próximas a A Pobra do Caramiñal.
El camino de la noche del 21 al 22
La última vez que la madre de Diana Quer -también Diana- vio a su hija fue en las inmediaciones del parque Valle-Inclán, el corazón de las fiestas de A Pobra. La madre la había llevado en coche y se despidió de ella alrededor de las 22:30.
La joven madrileña pasó unas horas con unos amigos y poco después de las 2:30 emprendió el camino de vuelta a su casa, a unos veinte minutos a pie. De auerdo a las investigaciones de la Benemérita, la última vez que con certeza se vio a Diana Quer fue en las inmediaciones de una pizzería, rumbo a la urbanización en la que pasaba el verano con su madre y su hermana Valeria, de 16 años.
Las pesquisas sobre los movimientos de su teléfono móvil registraron una actividad en torno a las 3:30 de la madrugada. Su madre, Diana López-Pinel, ha rechazado en todo momento que la joven llegara a la vivienda: duerme en la habitación contigua con la puerta abierta y habría advertido su presencia, asegura.
Batidas y registros
Los vecinos de A Pobra do Caramiñal viven en la inquietud de no saber qué ha ocurrido con la joven y por qué ha desaparecido en las calles de este pueblo. Algunos de ellos se presentaron voluntarios para rastrear en la Curota, un monte próximo, en busca de indicios que sirvieran para dar con su paradero.
La Guardia Civil coordina el operativo de búsqueda, en el que también están implicados efectivos de Protección Civil, Policía Local e incluso la Infantería de Marina. Una patrullera del Instituto Armado, además, fondea en aguas próximas en A Pobra.