Tania Sánchez se asoma a la balconada del Círculo de Bellas Artes y posa para la foto. Delante, Cibeles, Colón, los rascacielos… Entre risas, recuerda aquella escena en la que el Rey León le dice a su hijo: “Algún día, todo esto que ves será tuyo”. Y en esas está. La diputada de Podemos acompaña a Rita Maestre en la conquista de la secretaría general de Podemos en Madrid.
La diputada nacional engrosa la candidatura llamada –desde fuera– errejonista: “No vamos a aceptar las etiquetas que quiere imponernos el adversario”. Afronta los últimos dos días de campaña. Viene y va en moto. Corre. De entrevista en entrevista. Los inscritos pueden votar hasta la medianoche del miércoles y los resultados se conocerán el viernes.
Sánchez quiere menos testosterona al frente de su partido y más mujeres al frente. Cree las explicaciones de su compañero Espinar acerca de la compra-venta de un piso que le reportó cerca de 20.000 euros. La vivienda de Alcobendas tiene una sombra alargada y ha cubierto de incógnita los últimos días del proceso. En uno y otro lado, “no saben qué pasará”.
¿Cree que la dirección de Podemos afín a Iglesias ha utilizado el caso Espinar como pretexto para influir en las primarias de Madrid?
La mayor parte de la gente que ha hecho eso ya lo hizo en la primera fase de la campaña, cuando se votaron los documentos. No es bueno que la dirección ejecutiva pierda la imparcialidad en torno al proceso de Madrid. Entiendo que es complejo porque la mayoría de ellos están inscritos y pueden votar. En lo que a nosotras respecta, como ya dijimos al principio, estamos discutiendo la hoja de ruta para Madrid. Mezclar eso con otras discusiones que vendrán más tarde nos lleva a un centralismo impropio de Podemos.
¿Le molestan los tuits o los apoyos velados de Iglesias e Irene Montero a Ramón Espinar?
Nunca me molesta que la gente tenga una posición propia y no tiendo a mezclar mis relaciones personales con los planteamientos políticos. Nuestra organización disfruta de una gran pluralidad.
¿Pone la mano en el fuego por Ramón Espinar?
“La mano en el fuego” es una expresión horrible. Lo he dicho muchas veces. Ramón dio explicaciones desde el primer minuto, cosa que no sucede nunca con el resto de partidos. Fue claro y le creo. No hay que seguir ahondando en eso.
Hace un par de años se publicó una información parecida, en este caso con usted como protagonista. Se hablaba de la compra-venta de un piso con su consecuente beneficio. ¿Qué diferencia su caso del de Espinar?
Ninguno de los dos es ilegal. Ambos hicimos el trámite pidiendo aprobación a la Comunidad de Madrid porque así lo exige la vivienda pública. También ambos nos acogimos al precio de venta que permitía la ley.
Pasado el tiempo, ¿volvería a hacerlo?
Claro. Cualquier persona, con independencia de su profesión, tiene derecho a vender su casa para comprarse otra.
Podemos ha cargado contra la “máquina del fango” por “querer interferir en este proceso de primarias”. Si la información destapada se refiriera a un político de otro partido, ¿ustedes no clamarían al cielo?
Creo que, de haber ocurrido, no conoceríamos esa información.
¿Por qué? Los medios publican casos similares referentes a miembros de otras organizaciones.
No es lo mismo. Sale información de gente del PP que coge millones de euros, los reparte entre sus amigos y deja los servicios públicos en una situación de absoluta precariedad. No hay relación posible entre una cosa y la otra.
¿Insinúa que existe una conspiración mediática contra Podemos?
No creo en las conspiraciones. Los medios de comunicación son un elemento central en cualquier sistema democrático. Pero en este país, también lo dijo Pedro Sánchez, hay grupos editoriales altamente influyentes que han sobrepasado la línea roja. Querer influir es razonable, pero no a costa de perder rigor. En mi caso se publicaron portadas que fueron mentira. Nunca sacaron otra que lo desmintiera, sino un cuadradito pequeño. Necesitamos asumir el cambio político. Hay modelos en crisis, que se resienten. Entre ellos, el periodístico.
Si saliera una información así acerca de un político de otro partido, ¿no se rasgarían las vestiduras y pedirían explicaciones de continuo?
¡Pero es que esas explicaciones ya se han dado!
¿La reacción en tromba de la que se queja Podemos es fruto del listón que ustedes mismos han elevado?
Desde que existe Podemos se han dado muchas reacciones en tromba con noticias que luego han quedado en nada. Es lo habitual. Muchas denuncias contra nosotros se evaporan cuando llegan al juzgado. Mira el auto que archivó mi causa.
¿Es coherente maldecir la especulación de la vivienda y obtener un beneficio de 20.000 en un proceso de compra-venta?
El problema de la vivienda pública en esta Comunidad ha tenido que ver con las decisiones de Esperanza Aguirre, que decidió acabar con su funcionalidad. La Administración ya no puede bajar su precio para facilitar el acceso a más gente, tal y como recoge la Constitución. Esto derivó en un cambio: un aumento desproporcionado en el precio módulo. Eso es por culpa de Aguirre, lo ha denunciado Ramón y tiene razón.
¿Que todo el mundo tenga derecho a una vivienda no es contradictorio con comprar y vender una sin haberla ocupado?
Te he respondido antes. El problema en su conjunto no tiene que ver con lo que hagan una, dos o quinientas personas. Los jóvenes no poseen capacidad para acceder a un piso, el mercado de alquiler es irrisorio y carísimo… Mucha gente comparte casa hasta los cuarenta.
¿Qué Podemos quiere?
Uno que se parezca al de sus orígenes. Cuando nació Podemos, se consiguieron dos logros cruciales. Dejamos de marcar nuestra agenda en función del deseo del adversario y dejamos de exigir identidades maximalistas que bloquearan la posibilidad de construir nuevas mayorías. Quiero un Podemos que sea capaz de recuperar el país para su gente. Estamos en condiciones de hacerlo y ahí debemos encontrarnos.
¿Existen el pablismo y el errejonismo?
No. Existe mucha gente que mantiene distintas opiniones y estrategias para cada cosa concreta. Si recorres los círculos, escucharás que los inscritos no conciben un Podemos sin alguno de los dos. No debemos elegir. Cuando nos coloquen en esa tesitura, tenemos que patear la disyuntiva y repensar cuál es la cuestión real.
¿No percibe en las dos candidaturas discursos referenciados en Iglesias y Errejón?
No queremos tutelas. No tomaremos posición en función de un referente masculino. Queremos una política más feminizada y más feminista. Nadie nos puede obligar a colocarnos a favor de papá o papá. Las dos figuras son imprescindibles. Quien pretenda hacer creer a los inscritos que lo que se decide en Madrid es “Pablo o Iñigo” quiere situarnos donde lo desean nuestros adversarios.
Hablan mucho de construir un Podemos feminista. ¿Su partido es machista?
La política es machista. Podemos viene a transformarlo todo, también la política. Nuestro programa, en lo feminista, es más avanzado que cualquier otro concebido por la izquierda en los últimos veinte años. Debemos avanzar para extender esta propuesta, que compartimos todos. En la cotidianidad de Podemos no hay machismo, pero las estructuras políticas están influidas por un sistema patriarcal. Miremos a Colau y Carmena que, con absoluta contundencia, han demostrado que las mujeres pueden cambiar la política.
¿Le gustaría que una mujer liderara Podemos en el corto plazo?
Me gustaría que muchas mujeres lideraran muchas cosas. En Podemos fuimos capaces de que nuestro cartel electoral del 26-J no fuera una cara, sino muchas; de hombres y mujeres. Los liderazgos plurales y colectivos con funciones repartidas son más eficaces. Hemos visto partidos con mujeres al frente, pero quedaron absorbidas y no rompieron con lo establecido. Cuando una mujer está en minoría en un espacio de poder, es fácil que la estructura la modifique a ella. Pero si entramos muchas, sucederá lo contrario.
Quienes atacan su candidatura les describen como “el Podemos moderado”.
Quien necesite poner adjetivos a Podemos no ha entendido lo que somos. Los adjetivos achican nuestra capacidad de acción y limitan el acceso a mucha gente.
En una entrevista con este periódico, Miguel Urbán –partidario de la candidatura rival– dijo que su proyecto resta a Podemos antagonismo con el PSOE.
Es un error que Podemos se sitúe y marque sus estrategias mirando al PSOE. Debemos ser antagonistas con los poderes económicos que trajeron la crisis y con las estructuras de poder que permiten seguir mandando a quienes no se presentan a las elecciones. Esto se conseguirá construyendo fuerza popular con el apoyo de mucha gente y sin mirar al PSOE.
¿El acuerdo de Espinar con los anticapitalistas es un viraje a la izquierda de la candidatura afín a Iglesias?
Eso se lo tienes que preguntar a ellos. Los anticapitalistas dicen que Vistalegre fue un error. Me llama la atención que Ramón lo piense. Veo una contradicción. Aunque cada uno es libre de aliarse con quien quiera, claro.
¿A qué contradicciones se refiere?
La candidatura de Ramón ha pactado con quienes defienden que Vistalegre fue un error, cuando creo que están satisfechos del recorrido que hicimos. Ramón y Monedero consideran un acierto haber puesto la cara de Pablo en la papeleta.
El reglamento une las dos candidaturas porque estipula que los hipotéticos gobiernos con el PSOE deben decidirse por votación entre los inscritos, aunque Espinar rechaza de antemano formar Ejecutivos con Ferraz.
En Podemos las decisiones las toman los inscritos. Yo nunca les robaría el debate. Si un municipio tiene que tomar una decisión a ese respecto, la dirección debería acompañar sin perder de vista los objetivos de transformación y procurar que la decisión adoptada no deje por el camino las propuestas. Si alguien piensa que hay que adoptar una posición previa, estaría fijando una línea inamovible para los inscritos.
Visto con perspectiva, ¿Podemos debería haber facilitado el gobierno del PSOE tras su acuerdo con Ciudadanos?
La incapacidad de formar un gobierno alternativo al de Rajoy está en el PSOE, no en Podemos. Esa misma incapacidad les llevó a romperse por la mitad. Dar un paso adelante y asumir el cambio les suponía cuestionar lo que habían hecho en los últimos veinte años. No hacerlo les llevó a entregar el país al PP, con la consiguiente pérdida de derechos sociales. No supieron resolver esa contradicción.
¿Podemos debe presentarse a las elecciones con IU?
Ya lo ha hecho. Fue un buen resultado. Debemos seguir ampliando el espacio del cambio y conseguir que se sume más gente. El ejemplo de las candidaturas municipales demuestra que hay que hacer alianzas por abajo, y no por arriba.
¿Por qué cree que Maestre es mejor candidata que Espinar?
Rita es mejor candidata que Ramón porque es la representación clara de que no hay contradicción entre lo que se nos quiere dar a elegir. Nuestros adversarios quieren obligarnos a optar entre instituciones y movimientos sociales. Ella ha demostrado que forma parte de los movimientos de lucha a la vez que convierte las instituciones en algo distinto. Rita es mejor candidata porque tiene claro que la dirección de Podemos debe ser cooperativa y rebajar la testosterona.
Maestre asegura que su objetivo no pasa por ser candidata a la presidencia de la Comunidad de Madrid. ¿Y el suyo?
Hemos demostrado estar a disposición del cambio en el papel que nos ha correspondido. Queda mucho tiempo para las autonómicas y las municipales. Decidirán los inscritos. En ese momento, propondremos los candidatos que estén en mejores condiciones para expulsar del Gobierno al PP de Cifuentes.