Lagarder: "Me cogieron por el cuello y gritaron 'hijo de puta vete a tu país'"
Este activista rumano denuncia en EL ESPAÑOL que la Policía, en vez de socorrerlo, le preguntó si "sabía quién fue Franco".
21 noviembre, 2016 02:36No es la primera vez que el activista sin techo Lagarder intenta 'reventar' una manifestación. Esta vez su objetivo fue acercarse a la plaza de Oriente, donde unas 200 personas se reunieron para honrar a Francisco Franco, con un cartel que decía que Franco era un asesino. Sin embargo, el asunto no se limitó a que la Policía lo echase del recinto. Según describe el propio agredido a EL ESPAÑOL, al menos seis manifestantes "me rodearon y me dieron puñetazos por todo el cuerpo y en la cara" sin que la Policía "hiciera nada" por frenar la paliza.
La descripción que el agredido hace sobre qué ocurrió este mediodía en la madrileña plaza es demoledora: "Me cogieron por el cuello y me agaché. Me pegaron muchas patadas. Me gritaban: 'hijo de puta, vete a tu puto país". Todo sucedió en cuestión de minutos y, según Lagarder, bajo la mirada de la Policía, que no hacía nada por frenar las agresiones.
"En lugar de identificar a los agresores, me pidieron el DNI a mí. Cuando se lo entrego dicen: '¡encima rumano!'. Cuando les afeé que no habían pedido el carnet de identidad a los agresores, la Policía me dijo que era yo el que había venido a molestar a la fiesta nacional y me preguntaron si sabía quién fue Franco en este país", juzga el agredido.
Lagarder abandona el hospital Clínico de San Carlos a las nueve de la noche, siete horas después de "colarse en el metro" para poder recibir atención médica. A esa hora atiende telefónicamente a EL ESPAÑOL y le cuenta que, antes de recibir ayuda médica, "tuve que dar la dirección de la casa de una activista del 15M, porque como no tengo tarjeta sanitaria no me querían atender". Tras realizarle un TC de cráneo, le diagnostican una simple "agresión", "un traumatismo craneoencefálico" y una "policontusión". Un diagnóstico que le costará unos mil euros.
Tras abandonar el hospital con Rosa, una activista que vio la agresión por las redes sociales y se ofreció a llevarle al centro médico donde trabaja una amiga enfermera amiga suya, Lagarder se llevó del hospital el resguardo que certifica que "en un plazo de 20 días le pasaremos a factura a usted directamente". Él dice que no pagará la factura porque "no tengo para pagarlo". Este lunes está dispuesto a acudir a la Policía para denunciar los hechos.