José María Aznar presentó este jueves en sociedad la nueva Faes, ya desvinculada oficialmente del Partido Popular. El expresidente del Gobierno utilizó un tono más cordial que de costumbre y dejó a tres de sus patronos -Josep Piqué, Alberto Ruiz Gallardón y Rocío Albert- la parte más crítica hacia el PP. "Tampoco ha sido para tanto", describían desde Génova, donde siguieron muy de cerca y con cierto nerviosismo las palabras del expresidente de honor del partido. Aznar habló de una "nueva etapa de retorno a los orígenes" que emprende desde Faes, desde donde se compromete a "seguir ofreciendo a la sociedad ideas y políticas". El expresidente descarta, al menos de momento, formar otro partido político a la derecha del PP.
A pesar de que la sala estaba llena a rebosar, sobresalían dos particulares invitados: los vicesecretarios del PP Andrea Levy y Javier Maroto, dos de los nuevos cachorros que Mariano Rajoy incorporó a su comité de dirección en junio de 2015 y que nunca han trabajado con José María Aznar. Su presencia en un acto de la Fundación de Aznar fue entendida como un intento de Mariano Rajoy de neutralizar la disidencia de su antecesor. Los miembros del aparato nacional de Génova, que estuvieron sentados en segunda fila, alabaron la puesta en escena de los patronos y del presidente de Faes. Es "un debate de ideas que hay que tener", mantuvieron al terminar el acto.
Tras el acto, los exministros saludaron a los vicesecretarios y se escenificó, al menos ante las cámaras, un supuesto entendimiento entre el Partido Popular y la cúpula de la Fundación que les perteneció hasta hace apenas unas semanas. Pero nadie más de la cúpula del PP ni del Ejecutivo acompañó a Aznar en la presentación de su nueva Fundación, a pesar de que trabajó codo con codo con Javier Arenas o Pablo Casado.
La "indefinición" del PP
Desde la dirección nacional del PP escucharon con atención la intervención final de Aznar. Lo que no se esperaban es que el exministro de Justicia, que presentó su dimisión tras retirar Mariano Rajoy la reforma de la ley del aborto, reconociese públicamente que él mismo había llegado a esconder sus propias ideas para conseguir más respaldo en las urnas. "Pensábamos que esa indefinición nos podía permitir aumentar nuestra base electoral", añadió el exalcalde de Madrid ya sin cargo público activo.
Gallardón cree que el centroderecha en España ha escondido tradicionalmente en España, desde que llegó José Luis Rodríguez Zapatero al poder en 2004, ha habido un intento de deslegitimar la ideología liberal y conservadora de la que él mismo formaba parte. "Y creo que en el centroderecha nos hemos escondido. Hemos estado avergonzándonos de lo que en realidad pensábamos", dijo. Además, el expresidente de la Comunidad de Madrid reconoció que, en un momento determinado de bonanza económica, el PP creía que "solo con una buena gestión se podía conseguir el apoyo de los ciudadanos. Pero eso hoy no ocurre. Si hoy queremos su apoyo, tenemos que convocarle a un proyecto compartido".
"No hay democracia sin respeto a la ley"
El primero, que presentó su dimisión tras retirar Mariano Rajoy la reforma de la ley del aborto, aseguró, sin citarles expresamente, que el PP "había llegado a esconder su ideología porque pensaba que la indefinición ideológica les permitiría aumentar su base electoral". "En el centro derecha hemos estado durante los últimos años avergonzándonos de lo que de verdad pensábamos", añadió. Desde Moncloa, donde Rajoy comparecía tras recibir al primer ministro irlandés, evitó entrar en la polémica y zanjó el tema asegurando que no podía opinar de algo que no había escuchado.
Los patronos de Faes, presentados por el secretario general de la Fundación, Javier Zarzalejos, también se posicionaron con respecto al desafío catalán. En este asunto, el exministro Piqué reclamó más pedagogía por parte del Ejecutivo para "combatir" al independentismo. "Que Cataluña será un país independiente no es verdad", zanjó el expolítico catalán. En la clausura del acto, Aznar envió un aviso a navegantes: "No hay democracia sin respeto a la ley".