El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, profundiza en la idea que la formación está promocionando de cara a su congreso: que, "pase lo que pase" en Vistalegre 2, el partido salga unido. Iglesias afirma que "lo tiene muy claro"; tanto, como que Íñigo Errejón debería mantenerse en un "nivel de responsabilidad equivalente al que tiene ahora" en esta cita.
"Lo digo de forma clarísima", ha apostillado durante una entrevista en La Sexta, aunque ha precisado que la responsabilidad futura de Errejón dentro del partido "dependerá del Consejo Ciudadano" que salga de Vistalegre 2. "Pero si de mi dependiera, yo no tengo dudas", ha recalcado.
Sin embargo, la división en la formación morada es obvia. A menos de dos semanas de la gran cumbre del partido Iglesias afirmó, durante su intervención en El Objetivo, que "nadie dentro quiere hacer de Podemos un PSOE", algo en lo que "creo que hay algunas propuestas o dinámicas que nos podrían acercar a ellos".
"No quiero señalar a nadie"
Fue uno de los momentos en los que quedaron de manifiesto las diferencias entre facciones. De hecho, la presentadora le preguntó por acerca de a quién se refiere con esas palabras, tras lo que el líder de Podemos dijo que "no quería señalar a nadie" y que se "puede ser crítico sin señalar a nadie", esgrimiendo la responsabilidad.
Tampoco quiso ser más preciso cuando salió al paso del malestar en Izquierda Unida después de que Tania Sánchez viniera a decir que Podemos no debería parecerse a ellos. Pablo Iglesias reconoció que se había disculpado con Alberto Garzón por ello porque "no ha estado bien que algunos compañeros hayan usado a IU como contraejemplo de lo que no queremos ser".
Y más autocrítica, aunque en este caso extendiéndola a otros compañeros: Podemos no debía "llevar a los medios debates que tendrían que haberse dado en otro lugar".
La alusión al PSOE no era casual ya que en torno al Partido Socialista gira, en su opinión, una de las diferencias entre los proyectos que defienden tanto él como los partidarios de Íñigo Errejón. "Nosotros estamos haciendo oposición" al Gobierno, dijo Iglesias, mientras que "la corriente de Íñigo dice que ese papel está en disputa" con el partido de Ferraz. Unas tesis que, en cualquier caso, calificó como "más conservadoras" que las propias.
PSOE: "Ministerio de maquillaje social"
Sin embargo, Iglesias no dudó en calificar al PSOE como "ministerio de maquillaje social". Aunque afirmó que, salga elegido quien sea como nuevo secretario general, criticó con dureza que los socialistas "estén construyendo con PP y Ciudadanos una triple alianza para frenar el cambio".
Esta divergencia entre los proyectos de pablistas y rrejonistas es sólo una de las que habitan en sus distintas propuestas. Pero ¿sería posible acercar posturas antes de Vistalegre 2? En opinión de Iglesias, es posible pero "no habría que dramatizar" en caso contrario.
Lo que ocurra después es otra de las incógnitas que el secretario general del partido no aclara del todo. Lo que deja claro es que lo que se votará "son listas asociadas a documentos en dos bloques: uno político y otro organizativo, y creo que el que gane tiene que liderar".
El liderazgo está asociado a las ideas
¿Dimitir en caso de una posible derrota? "El liderazgo está asociado a las ideas, lo contrario sería absurdo. Uno tiene que ser coherente con su proyecto y no es razonable que si sale otro lo normal sería dejar el sillón. Yo no tendría ningún problema en dejarlo y tener un papel más discreto".
Iglesias también respondió a preguntas sobre el decreto del Gobierno contra la pobreza energética, "que nos parece insuficiente, una burla, diferente a lo que pide la sociedad".
Sobre el asunto del senador Vidal, que había presumido de que la Generalitat poseía los datos fiscales de los catalanes de una forma irregular, Iglesias cree que "parece un inflitrado del PP en ERC, y sospecho que en ERC se han dado cuenta".
Por último, también opinó que "un referéndum unilateral en Cataluña puede ser legítimo pero debe ser también legalmente vinculante" para que sea válido.