Tres personas de la misma familia han sido halladas con signos de muerte violenta en una vivienda en la parroquia de Callobre, en A Estrada (Pontevedra).
En la vivienda, situada en la parroquia de Callobre, los agentes hallaron a una mujer ahorcada, identificada con las iniciales J.I.O., de 56 años; su madre, A.O.T., muerta de un disparo, y el marido de la primera, M.L.C., de 56 años, también abatido supuestamente por la misma escopeta, hallada junto a él.
Según fuentes de la investigación, los cadáveres de la mujer y de su madre fueron hallados en la misma habitación, mientras que el cuerpo del hombre fue encontrado en otra habitación de la vivienda.
Efectivos de la Guardia Civil, la Policía Local y Emerxencias han acudido a la zona después de recibir un aviso a primera hora de esta tarde. Hasta el momento, las fuentes de la investigación han indicado que es pronto para extraer alguna hipótesis de la situación y siguen recabando pruebas en el lugar del suceso.
Segundo episodio de violencia en tres días
Por su parte, la Guardia Civil investiga el hallazgo, el mediodía del viernes, de un hombre ahorcado en su domicilio en Salceda de Caselas (Pontevedra) y de su mujer, que presentaba lesiones en el cuello y un golpe en la cabeza presuntamente producidos por su marido.
La mujer, de 57 años y que responde al nombre de Hermosinda L.C., ha sido trasladada al hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, donde se encuentra ingresada en la UCI por un hematoma cerebral pero fuera de peligro.
Hermosinda L.C. fue quien llamó a unos allegados para informarles de que se encontraba mal, sin dar más detalles, y estos acudieron al domicilio familiar, situado en la parroquia de Soutelo, han explicado a Efe fuentes de la investigación.
Allí la encontraron con un golpe sangrante en la cabeza y heridas en el cuello, sin que llegara a perder la consciencia en ningún momento, y poco más tarde hallaron a su marido, Pablo F.M., ahorcado en un galpón anexo a la vivienda. Según La Voz de Galicia, se halló una nota de confesión de su puño y letra, en la que figuraba también su deseo de ser enterrado en su parroquia natal de San Xurxo, en este msmo municipio.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Galicia indican que de las diligencias practicadas hasta el momento se desprende que las lesiones que presentaba la mujer fueron provocadas por su marido, quien posteriormente se suicidó.
Del caso se ha hecho cargo el Juzgado de Instrucción número 3 de O Porriño en funciones de guardia, precisan las fuentes, que confirman que no constan denuncias previas por malos tratos.