Mariano Rajoy se encuentra "estupendamente" el día después de revalidar su cargo como presidente del Partido Popular por cuarta vez. El presidente del Gobierno ha aprovechado una entrevista en TVE este lunes por la mañana para advertir a Ciudadanos, el partido con el que se asoció para sacar adelante la sesión de investidura, de que no ponga límites a los mandatos del presidente. "Si la gente quiere votar a una persona, ¿por qué lo vamos a prohibir? Debe ser una decisión voluntaria de las personas".
Con esta declaración, el presidente del Gobierno pone en riesgo el pacto que su partido firmó con Ciudadanos y que incluía que el cargo presidencial no dure más de dos legislaturas. El líder del PP defendió públicamente a su 'número dos' en el partido, María Dolores de Cospedal, que ha protagonizado este fin de semana una polémica por acumular tantos cargos de tanta responsabilidad. No obstante, Rajoy defiende que la prioridad de la secretaria general "tiene que ser el Gobierno y atender a todos los españoles". Por eso se ha creado la figura del coordinador general, para que Fernando Martínez-Maillo pueda ocuparse de facto del día a día del partido.
El propio Rajoy se ha puesto como ejemplo en esta polémica por la acumulación de cargos. "Yo soy presidente del PP y presidente del Gobierno, y a lo que me dedico es a actuar como presidente del Gobierno". A ser presidente del partido "me dedicaré los fines de semana y un poco los lunes". Será el nuevo 'número tres' quien estará full time en Génova y Cospedal y Rajoy "en los temas que requieran nuestra atención", según el propio presidente.
Tras el XVIII Congreso Nacional del PP donde no ha cambiado prácticamente nada, Rajoy ha asegurado que no ha buscado equilibrios entre el Gobierno y el partido, en concreto entre Cospedal y la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. "Son dos personas que lo han hecho muy bien y confío en ellas, lo que funciona no hay que cambiarlo".
En cuanto al misterio de si a partir de mayo convocará elecciones generales, Rajoy ha insistido en que no lo hará "porque sería un disparate". Su prioridad ahora es presentar los Presupuestos Generales del Estado. "Vamos a hablarlo con todos. Voy a intentarlo, y en cualquier caso los voy a presentar".
Casi al mismo tiempo que Ana Mato declaraba ante el juez por haberse beneficiado de forma ilegal de los beneficios obtenidos presuntamente de forma ilícita por su exmarido, Mariano Rajoy insistió en que quizá hubieran podido "hacer algo más" para frenar la lacra de la corrupción. Aunque ha sacado pecho: "Hemos tomado muchísimas decisiones que afectaron a personas que ahora no están en el PP, hemos modificado muchas leyes. Estoy abierto a cualquier proposición".
Mariano Rajoy también quiso matizar la conversación que mantuvo con Donald Trump y en la que supuestamente el presidente del Gobierno español se había brindado al estadounidense a ser el interlocutor con Europa. "Yo no me ofrecí como intermediador de nadie. Solo le dije que tenía una buena interlocución con América Latina y que tenemos buenas relaciones. Creo que es razonable que diga cuál es la posición de España y haga ver la importancia que tiene nuestro país".