La Audiencia Nacional acaba de ordenar al juez Fernando Andreu que cite a declarar como investigados a los responsables del Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que tenía bajo su competencia la supervisión de BFA-Bankia en el momento de su constitución y posterior salida a bolsa, entre ellos el exgobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordoñez y el expresidente de la CNMV Julio Segura.
En un auto, los magistrados de la Sección Tercera de lo Penal admiten parcialmente el recurso de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) contra el auto de Andreu que rechazó la práctica de una serie de diligencias solicitadas en el marco de la investigación por la salida a bolsa de la entidad financiera.
Además de a Fernández Ordóñez y Segura, la Sala acuerda que se cite también como investigados a los responsables del Banco de España Pedro Comín, Mariano Herrera García-Cantauri, Pedro González, Jerónimo Martínez Tello y Javier Arístegui y de la CNMV Fernando Restoy.
El auto considera procedente la petición de los recurrentes de llamar a declarar a los responsables de ambas entidades, que tenían bajo su competencia la supervisión de BFA-Bankia en el momento de su constitución y salida a bolsa y que, según aquellos, la autorizaron "pese a las reiteradas advertencias del equipo de inspección del BdE de la inviabilidad del grupo y de que la solución de salida a bolsa no debía ser aprobada, pues suponía grave perjuicio para accionistas, preferentistas y contribuyentes (estimado en unos 15.000 millones de euros)".
La Sala analiza la testifical y los correos electrónicos aportados en la causa del inspector del Banco de España José Antonio Casaus y califica de "razonable" y "razonada" la pretensión de la CIC sobre la base de la existencia en este procedimiento de indicios "múltiples, bastantes y concurrentes de criminalidad respecto de los responsables del Banco de España y la CNMV en cuanto garantes e indicativos de la corresponsabilidad de ambos en los hechos investigados".
Los jueces consideran también que en la fase actual de la instrucción, tal y como sostienen los recurrentes, no es el momento procesal para circunscribir el ámbito del procedimiento a una determinada calificación jurídicas de los hechos (posible estafa de inversores del ex art 182 bis), como ha realizado el instructor, sino que no procede verificarse hasta finalizada la investigación.
La Sala rechaza la solicitud de que se oficie al Banco de España para que aporte todos los correos electrónicos remitidos y recibidos desde su dirección corporativa entre José Antonio Casaus y Pedro Comín, por tratarse de una diligencia "manifiestamente excesiva".
Informe “demoledor”
En su auto, el tribunal, presidido por Antonio Díaz Delgado, subraya que el informe por el que se advierte de los peligros de la salida a bolsa de Bankia es “demoledor”. La Sala analiza los correos entre diversos responsables del Banco de España sobre el plan de capitalización de Bankia y concluye que el informe de los inspectores es “absolutamente contraria” a la salida a bolsa en estructura de doble banco, BFA-Bankia. “No va esta alzada a copiar el informe, que no tiene ni una línea de literatura, y que es contundente especialmente en cuanto a que los acreedores de BFA tienen sus expectativas de cobro en las acciones de Bankia”.
El tribunal hace especial a la parte del informe en el que se dice que “no es viable a medio plazo una estructura como la de BFA con un pasivo de 21.000 millones de euros… al que hacer frente básicamente con unas acciones valoradas en el mercado en 9.000 millones de euros”.
Para revocar la decisión de Andreu no de investigar a los principales responsables del Banco de España y CNMV, el tribunal tiene en cuenta en informe de seguimiento del 21 de diciembre de 2011 en el que se denuncia que la dirección de BFA-Bankia “anteponía sus propios intereses a los de la entidad, denunciando las excesivamente generosas políticas retributivas y de prejubilaciones poniendo ya en cuestión que pudiesen devolverse los fondos aportados por el FROB para la constitución del SIP”. También recoge otro informe de 21 de marzo de 2012, en el que su primera conclusión es que la matriz del grupo BFA “no es una entidad viable”.
“Este grupo no es viable”
Los magistrados consideran importantes los correos aportados a la causa entre los responsables del Banco de España, principalmente uno entre José Antonio Casaus y Pedro Rodríguez Comín, fechado el 14 de abril de 2011, en el que el primero le dice: Dije que no lo diría más… ¿o si? Pero lo digo: este grupo NO ES VIABLE”… “En caso contrario se acabará malvendiendo el banco cotizado por un lado y el FROB tendrá que hacerse cargo del banco no cotizado, por el otro, con un coste por el contribuyente de en torno a 15.000 millones de euros frente a la opción de coste cero para el contribuyente que supondría que el grupo fuera comprado hoy por una entidad potente y solvente”.
El tribunal recoge un tercer correo, del 10 de mayo de 2011, entre los mismos interlocutores, en el que Casus envía a Comín un análisis del grupo Bankia. En él se vuelve a afirmar que el grupo no es viable por “sus muy graves y crecientes problemas de rentabilidad, liquidez y solvencia”. En él, se analiza se analiza cada uno de estos apartados con “números demoledores”, según interpreta el propio tribunal.
Así, señala su “total ausencia” de rentabilidad como el “mayor problema”; y el problema de liquidez como “la principal amenaza”: “Bankia ha recibido ayudas públicas directas o indirectas a largo plazo por más de 23.000 millones de euros (…) Pongamos estos 23.000 millones de euros en relación con los 33.000 millones de euros de emisiones de Bankia que vencen entre 2011 y 2012 y llegaremos a la conclusión de que Bankia ha podido afrontar una gran parte de los vencimientos en los últimos tres años gracias a las ayudas públicas directas o indirectas del Estado español”.
“Falacia de los resultados presentados”
El último correo analizado es el remitido por la totalidad del equipo de inspección a Comín, el 16 de mayo de 2011, para ante su inmediata reunión con el subgobernador del Banco de España para tratar el tema de Bankia. “Este correo añade una demoledora advertencia sobre el Gobierno interno del grupo, de los que (entre otras cosas) informa: un consejo muy politizado y poco profesional; continúan los mismos gestores que han llevado a las entidades a solicitar ayudas públicas; desacreditados en el mercado”.
“El contenido completo de tales correos electrónicos no deja lugar a dudas sobre la expresa, previa y contundente información que la dirección del Banco de España tuvo, tempestivamente, acerca de la inviabilidad del grupo y la falacia de los resultados presentados efectuada por el equipo de inspección del mismo Banco de España”, recoge el auto.