El Partido Popular todavía no ha fijado su posición sobre la propuesta de ley que la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales presentó el 4 de mayo en el Congreso de los Diputados. Unidos Podemos registró formalmente la propuesta bajo el título "ley contra la discriminación por orientación sexual, identidad o expresión de género y características sexuales y la igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transfénero e intersexuales". La iniciativa cuenta con un amplio respaldo de todos los grupos políticos, pero todavía no cuenta con el apoyo explícito del partido que gobierna, que recurrió al Tribunal Constitucional el matrimonio homosexual por "desnaturalizar" el matrimonio.
Fuentes de la dirección del PP aseguran a este diario que su posición definitiva irá en sintonía al manifiesto que aprobó el Consejo de Ministros del 12 de mayo, que busca elaborar una estrategia nacional de los derechos de las personas lesbianas, gais, bisexuales, transexuales e intersexuales. El objetivo es el reconocimiento y equiparación de los derechos de las personas LGTBI. Las mismas fuentes aseguran que, aunque "todavía no se ha fijado posición", el sentir mayoritario es "apoyar que tengan sus derechos reconocidos".
La Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), siguiendo la estela de las normas en defensa del colectivo aprobadas en parlamentos autonómicos, ha elaborado con la ayuda de decenas de asociaciones, sindicatos y agrupaciones el proyecto de ley que se desarrolla a través de XVII capítulos y 96 artículos. Un trabajo que según su presidente, Jesús Generelo, ha supuesto “más de un año de trabajo y meses de negociación con todos los grupos políticos”. “La aprobación de una ley con estas características es de vital importancia y su aprobación es urgente si se quiere acabar definitivamente con la discriminación por orientación sexual e identidad de género”, añade Generelo, el líder de la asociación LGTB más grande de España.
El proyecto de ley tiene carácter transversal y en él se plasman medidas en el ámbito laboral, sanitario, familiar, educativo o de la administración de la Justicia. Uno de los aspectos más polémicos que contiene el texto -con el objetivo de hacer disminuir las agresiones homófobas- es la inversión de la carga de la prueba -nunca aplicable a procedimientos penales ni administrativos sancionadores-.
No discriminación
La propuesta de ley también recoge la creación de varios órganos que garanticen el cumplimiento de la norma, como el Consejo Estatal contra la Discriminación por Orientación Sexual e Identidad de Género. Entre sus funciones está el “garantizar la no discriminación de las personas por orientación sexual e identidad de género” y deberá -en el caso de que el proyecto se convierta en ley- remitir al Gobierno central y las Comunidades autónomas con periodicidad anual, un informe sobre la evolución de la implantación de la ley destacando su efectividad.
El borrador pasó por la Comisión de Igualdad y todos los partidos presentaron su apoyo menos el PP, Unión del Pueblo Navarro y Foro Asturias. Miembros de la FELGTB se han reunido con el secretario de Estado, Mario Garcés, para hablar sobre la necesidad de aprobar la ley LGTB. Voces autorizadas aseguran, además, que las reuniones con la mano derecha de la ministra Dolors Montserrat tuvieron "muy buena sintonía". La catalana ya adelantó en su toma de posesión como ministra que el colectivo de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales sería "una prioridad" durante su mandato.
Buscar el apoyo de la vicepresidenta
Tal es el interés de Sanidad por estrechar las relaciones con este colectivo que, según explican fuentes de la dirección de la FELGTB, desde el propio ministerio les han recomendado pedir una reunión con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, para demandarle "apoyo decidido" a la proposición de ley. Desde que se registró la iniciativa hay de plazo hasta el 17 de junio para admitirla a trámite. La organización, sin embargo, pide que no se apure el plazo para que el proyecto pueda ser llevado a debate al pleno antes o durante el Word Pride, el Orgullo Gay Mundial que se celebrará en Madrid entre el 23 de junio y el 2 de julio.
"Reivindicar este año el Orgullo, un Orgullo mundial, trasladando un mensaje de compromiso concreto sería un inequívoco mensaje al mundo de la responsabilidad de nuestra sociedad en la defensa de los derechos humanos", zanjan desde la FELGTB.