El viraje de Pablo Iglesias sobre el referéndum independentista del 1 de octubre responde a las presiones del ala más a la izquierda de Podemos y a sus socios en Cataluña. El líder del partido morado decía el pasado viernes que él, si fuera catalán, no tomaría parte en la consulta. Sin embargo, este martes respaldaba la idea de Ada Colau de facilitar todo lo posible que se celebre la votación y hasta pedía a todas las instituciones que hagan lo propio.
Si bien Iglesias remarcaba que Podemos "no se identifica" con la consulta convocada por Carles Puigdemont, a continuación respaldaba las tesis de los comunes que lideran Colau y Xavi Domènech. Unas tesis que consisten, básicamente, en respaldar el referéndum como una "movilización política" a pesar de que no comparten la hoja de ruta de la Generalitat.
Podemos siempre ha defendido que en Cataluña debe celebrarse un referéndum, sí, pero acordado con el Estado y, por ende, con carácter vinculante y efectos jurídicos inmediatos. Y, en caso de celebrarse, el partido de los círculos pedirá el "no" a la independencia.
Esta posición cargada de matices castigó sobremanera a Podemos en las últimas elecciones catalanas. Quizás por ello en estos días parece que el partido morado quiere impedir un castigo similar y, además, pretende contentar a sus socios preferentes en Cataluña, que son los miembros de Catalunya en Comú.
Derecho a decidir y el electorado
De hecho, a los comunes de Colau y Domènech les ocurre algo muy parecido: primero rechazaban la vía de Puigdemont y ahora, aunque en el fondo crean que quizás el referéndum no llegue a celebrarse, tienen que apoyar la colocación de urnas para no aparecer ante el electorado como contrarios al derecho a decidir.
Pero, además de querer compartir tesis con sus socios preferentes, Iglesias y los suyos se ven obligados a contentar a una parte de su partido. Y es que la corriente de Anticapitalistas, la ubicada más a la izquierda y la más cercana a Albano Dante Fachín, líder de Podemos Cataluña, defiende la validez de este referéndum. Sin ir más lejos, este mismo martes Teresa Rodríguez, secretaria general de Podemos Andalucía y cara visible de los anticapis, pedía otra vez que los ciudadanos acudan a votar el 1-O en Cataluña.
Postura común de Ciudadanos, PSOE y PP
La posición de Podemos, más allá de sus equilibrios internos, choca frontalmente con las tesis que comparten PP, PSOE y Ciudadanos. Los tres partidos están en contra del referéndum sin ambages ni dudas. Este mismo martes Albert Rivera arremetía con dureza contra Iglesias y Colau por su postura. Y, en la misma línea, Soraya Sáenz de Santamaría atacaba otra vez a los planes de la Generalitat.