La CUP no asistirá a la macromanifestación convocada para el sábado por el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat de Cataluña si la encabeza el rey. La diputada Mireia Boya ha dicho este domingo que “el rey no es bienvenido” y que es de una “hipocresía enorme” que Felipe VI “venga a pasearse por Barcelona y muestre su pésame” y al mismo tiempo “contribuya a financiar este terrorismo”, refiriéndose a las "relaciones de la corona con las monarquías pérsicas".
Contactada por este periódico, Andrea Levy, vicesecretaria del PP y diputada en el Parlamento catalán, ha criticado la decisión de la CUP que, dice, "siguen instalados en la radicalidad". “Nada nuevo en la CUP, siguen instalados en la radicalidad a que nos tienen acostumbrados. Pero quienes se quieran distinguir haciendo partidismo en estas circunstancias serán valorados por la sociedad, y no para bien”, ha señalado Levy.
La diputada ha considerado que este es un momento para la unión y no para la discusión, con independencia de la ideología de cada uno: “En mi opinión creo que en estos momentos no hay que estar en la micropolítica. Aún estamos pasando el duelo y ya habrá tiempo más adelante para debatir y discutir. Lo que toca ahora, se piense como se piense, es estar unidos porque el atentado es contra todos nosotros, contra nuestro modelo de sociedad y nuestro sistema de valores”.
Además, la vicesecretaria del PP ha destacado que el terrorismo es un problema global contra un modelo de sociedad y no contra un territorio específico. “Querer enfocar esto como un atentado contra Barcelona o contra los catalanes es no entender que nos enfrentamos a una amenaza global. Ha sido Barcelona como antes fueron Niza, París, Londres, Berlín o Bruselas. Los terroristas atentan contra un modelo de sociedad abierta con la que quieren acabar, y los políticos, como representantes de los valores de unidad, solidaridad y tolerancia de la ciudadanía, tenemos que estar a la altura de esa responsabilidad”.
EL ESPAÑOL ha contactado a los demás partidos políticos para obtener reacciones pero ninguno ha querido hacer comentarios.
Los desplantes de la CUP al rey
No es la primera vez que la CUP tiene un enfrentamiento de este calado con el rey. En el historial de la organización independentista hay varios episodios que ilustran el rechazo de la CUP a la corona. Pitadas, fotos rotas y amenazas con "cortarle el cuello" al monarca son algunos de los capítulos más señalados de este enfrentamiento.
En septiembre de 2016, varias decenas de personas quemaron imágenes del rey Felipe VI y páginas de la Constitución. Asistían a la manifestación anticapitalista de la Diada que recorrió las calles de Barcelona. Las imágenes del rey estaban impresas en hojas de papel que, en el reverso, contenían una página de la Constitución, y fueron quemadas con las antorchas que llevaban algunos de los manifestantes.
En la misma manifestación hubo cánticos contra el monarca: "Si el Rey quiere corona, corona le daremos; que venga a Barcelona y el cuello le cortaremos".
Todo ello quedó registrado en el perfil de Twitter de la CUP, que no ha retirado las imágenes ni los vídeos, en ocasiones retuiteados desde cuentas simpatizantes.
En diciembre del mismo año, los ediles de la CUP Capgirem Barcelona Josep Garganté y Maria Rovira colgaron un vídeo en las redes sociales en el que cortaban una fotografía del rey Felipe VI con una guillotina de papel.
Rovira abre el vídeo apoyando a los detenidos -ya en libertad-, que actuaron el 11 de septiembre en un "acto reivindicativo de libertad de expresión".
Después de subir el vídeo, miembros del grupo municipal colgaron del revés la parte superior de la fotografía cortada del rey -en la que aparece parte del torso y la cabeza- ante la puerta de su despacho del Ayuntamiento.
Un año antes, en junio de 2015, la CUP había convocado una pitada al rey en Gerona, durante la entrega de los premios Fundación Princesa de Gerona en el Fórum impulsa.
La manifestación había sido convocada bajo el lema "Pitada popular contra el rey de España" y se repitió al año siguiente más o menos en las mismas fechas.
Ahora, la CUP amenaza con no participar en la manifestación de condena a los actos terroristas de este jueves en Barcelona y Cambrils si Felipe VI encabeza la marcha.