La mujer de Granados pide al juez 23.000€ para la universidad de sus hijas

La mujer del exconsejero de la Comunidad de Madrid y principal imputado en la Operación Púnica, Francisco Granados, ha pedido al juez el desbloqueo de más de 23.000 euros de sus fondos para costear durante un año el curso universitario de sus hijas.

Según el escrito enviado por su defensa el 11 de septiembre, Nieves Alarcón, también investigada en la causa, hizo esta misma petición el 24 de octubre del pasado año. Y desde entonces espera respuesta de la Audiencia Nacional. El grueso de los fondos, según la petición remitida a la Juzgado de Instrucción número 6 en nombre de la mujer de Granados, iría destinado a pagar los estudios de la menor de la familia en ICADE, una de las universidades más caras y prestigiosas del país, dependiente de la Universidad Pontificia de Comillas.

Este centro educativo, según los datos aportados por Alarcón, cuesta en total 14.479 euros repartido en diez anualidades, además de otros 1.447 euros en concepto de matrícula. Para justificar este desembolso, la mujer de Granados esgrime un informe de los "psicólogos" que han recomendado que no se cambiara a su hija "de ambiente académico por la repercusión que podría tener para su salud".

Además, la familia Granados pide al juez Manuel García Castellón el desbloqueo de fondos para hacer frente a la gasolina de los traslados, la manutención de las dos jóvenes de (de 20 y 22 años), las facturas de sus teléfonos móviles y hasta las lentillas que emplea una de ellas "desde que tiene 13 años". En total, "unos gastos mensuales de 1.447 euros en los meses de septiembre a junio que está asumiendo la familia de la madre a duras penas", refleja la petición ante el juez. 

Para sustentar su petición, reiterada desde octubre de 2016, los letrados de Alarcón consideran que las hijas del matrimonio "obviamente no tienen por qué sufrir, más de lo estrictamente necesario, los efectos de que sus dos progenitores se encuentren incursos en el presente procedimiento penal".

La defensa de la mujer de Granados recuerda en su esrito que el artículo 606 de la Ley de Enjuiciamiento Civil considera que "son también inembargables el mobiliario y menaje de la casa, así como las ropas del ejecutado y su familia, en lo que no pueda considerarse superfluo. Y en general aquellos bienes como alimentos, combustible y otros que, a juicio del tribual, resulten imprescindibles para que el ejecutado y las personas dependientes de él pueda atender con razonable dignidad su subsistencia".