En 1986 los aviones F-18 del Ejército del Aire llegaron a España. Durante estos 30 años once aparatos han sufrido accidentes graves, el último de ellos esta mañana cuando el piloto Fernando Pérez Serrano realizaba la maniobra de despegue en Torrejón de Ardoz.
Este tipo de aparatos se han visto involucrados en nueve accidentes graves, dos de ellos con dos aviones implicados.
Primer accidente de un F-18 en España
Fue en siete de noviembre de 1988 la primera vez que un avión F-18 de Ejército del Aire se estrellaba en España. Ocurrió a quince kilómetros de Zaragoza, en las inmediaciones de una ciudad deportiva cercana a la sierra de La Muela.
El piloto, el capitán Ignacio Azqueta, avisó a la torre de control de que tenía problemas e intentó volver a la base aérea sin éxito. Afortunadamente Azqueta consiguió saltar en paracaídas y no resultó herido. Los análisis de los restos del aparato revelaron un fallo en los motores que provocó una explosión.
Colisión con un avión Hércules 130
Tan solo 8 días después de que se accidentara el primer F-18, otro aparato del mismo tipo que aterrizaba chocó con un aparato de pasajeros Hércules 130 que se disponía a despegar de la base militar de Zaragoza.
En este último viajaban cinco tripulantes. No hubo que lamentar víctimas personales aunque las dos aeronaves sufrieron desperfectos en las alas.
Muere un Teniente Coronel en el polígono de tiro de Navarra
El teniente coronel del Ejército del Aire Roberto Hurtado Pellejero falleció el 28 de noviembre de 1991 estrellarse el avión F-18 que pilotaba durante unas maniobras nocturnas con fuego real en el polígono de tiro de las Bardenas Reales, en Navarra. Fue la primera vez en la que un piloto perdía la vida en este tipo de aeronave en España.
Hurtado pertenecía a la base aérea de Torrejón de Ardoz. Un testigo pudo apreciar como el fuego se originó en el aparato y como este se precipitaba al vacío.
Un buitre provoca un grave accidente en Navarra
El 16 de agosto de 1994 otro bombardero F-18 sufrió un accidente en el polígono de tiro de las Bardenas Reales de Navarra por culpa de un buitre. El ave rapaz se colisionó con el motor derecho del aparato provocando el fallo de este.
El piloto de la nave que provenía de la base de Zaragoza, Eduardo Gil Rosella, salto en paracaídas sufriendo en su caída la rotura del peroné izquierdo. El aparato quedo destrozado.
Un muerto al chocar dos F-18 en Zaragoza
El 13 de marzo de 2000 dos aviones chocaron en pleno vuelo cuando sobrevolaran el termino municipal Ejea de los Caballeros en Zaragoza. Según la información recogida en el momento, los vecinos pudieron ver los dos aparatos ardiendo antes de que tocaran el suelo.
Uno de los pilotos, el teniente Bermejo Rosado, logró saltar a tiempo y caminar hasta el puesto de los bomberos. Sin embargo, el otro piloto -un capitán del Ejército del Aire- falleció en el accidente.
En 2003 un F-18 se estrelló en el mar de Gran Canaria
El avión del Ejército del Aire se estrelló en el mar después de que el piloto detectara una serie de fallos durante el vuelo. El militar decidió saltar en paracaídas y provocar la caída del aparato al mar.
Según informó en su momento el Ministerio de Defensa, el capitán Alemán fue rescatado en el mar por un helicóptero del Servicio de Búsqueda y Salvamento. El accidente tuvo lugar cuando el piloto cumplía una misión de instrucción. El aparato se partió en varios fragmentos al caer al mar.
Un herido en las Bardenas Reales al perder el control del avión
El accidente tuvo lugar en el termino Landazuría cuando un F-18 cayó cuando realizaba maniobras militares durante la noche del 2 de abril de 2009. El piloto pudo saltar en paracaídas y evitar la colisión aunque sí resultó herido.
El choque del avión al llegar al suelo provocó una explosión y las llamas pudieron verse desde las localidades cercanas.
Dos F-18 se estrellaron a 10.000 metros de altura en 2009
El 16 de junio de 2009 dos cazas del Ejército del Aire, procedentes de la base aérea de Gando (Gran Canaria), cayeron desde 10.000 metros de altura al chocar las alas de los dos aviones. Los dos pilotos sobrevivieron al hacer uso de sus asientos eyectables que les propulsaron al exterior y pudieron activar el paracaídas.
Los dos pilotos, con 700 horas de vuelo en el momento del accidente, cayeron al mar mientras realizaban un ejercicio de adiestramiento avanzado. Fue el segundo accidente, de un F-18, en 2009 tras el accidente en las Bardenas de Navarra.