La noche de los muertos vivientes inaugura las celebraciones invernales: sobre las puertas caen telarañas polvorientas, las calabazas reciben a los niños en busca de un trato y las muñecas de porcelana se convierten en pavorosos juguetes. Esta fiesta, que bebe de la tradición anglosajona, ha acercado a España los iconos aterradores hasta convertirse en parte de la cultura de esta noche del 31 de octubre.
Igual que las brujas, las arañas y los fantasmas son parte del decorado de Haloween en España, la venta de décimos con cifras simbólicas y aterradoras triunfan durante estos días. Según informa Ventura24, portal de venta de loterías y apuestas del Estado en internet, cada vez más españoles confían en los números de la mala suerte como talismanes de cara a la Lotería de Navidad.
El número 13 es uno de los favorito de los españoles, especialmente en El día de todos los Santos -o Halloween- porque se celebra el día 31 (13 al revés). Un reto a la fortuna a través de la simbología y la numerología.
Otra terminación pavorosa que nubla a la mala suerte y se transforma en buena es el 666. Esta cifra, relacionada con Satanás y el Anticristo, es una de las grandes predilecciones durante estos días.
El Gordo terminó en 13
El año pasado, por primera vez en la historia, el número 13 atrajo a la buena suerte. El número 66513 fue el ganador de El Gordo que cayó íntegramente en Madrid, nunca antes en la historia de la Lotería de Navidad, un décimo acabado en el número de la mala dicha había sido el premiado.
Dos niñas acabaron con el mito del 13, El Gordo salió en la séptima tabla a las 12.00 del mediodía en el Teatro Real de Madrid.
Más números del terror
Hay más números que se relacionan con la mala fortuna. Es el caso del 23, se le relaciona con una religión que lo considera una cifra mágica, además también está vinculado con ritos satánicos.
El mito se ha alimentado con películas que acercan la fábula a los espectadores hasta convertirlo en una referencia a la hora de pedir un décimo para la Lotería de Navidad.