El adoctrinamiento por parte del sector separatista también se ha colado en la tradicional Cabalgata de los Reyes Magos. Y la polémica ha llegado al desfile de Manresa, precisamente la ciudad elegida por TV3 para la retransmisión de este año de la llegada de los reyes.
El rey Baltasar dedicó desde el balcón del Ayuntamiento unas palabras a los miles de niños que, ilusionados, se encontraban allí para recibir a Sus Majestades de Oriente. Pero recibieron un discurso politizado con referencias a la situación del líder de ERC, Oriol Junqueras, actualmente en la prisión de Estremera, y el expresident Carles Puigdemont, huido en Bruselas. "Hemos visto niños separados de sus familias por la prisión y por el exilio y por otras situaciones injustas", dijo el tercer monarca.
Las palabras del rey Baltasar fueron recibidas con aplausos por los padres de los niños, que lucían símbolos de color amarillo para mostrar la solidaridad con los presos separatistas. Obedecían a las órdenes de la ANC y Òmnium Cultural, que días antes habían caldeado el ambiente pidiendo "teñir de amarillo" Manresa en protesta con la situación procesal de algunos líderes independentistas.
Las bufandas y los lazos amarillos y los mensajes políticos se convirtieron en los protagonistas de esta fiesta infantil. Y todo ello retransmitido por el canal público autonómico catalán.
También en Vic
En otras localidades, aunque con menos eco, también hubo proclamas independentistas. En Vic, por ejemplo, varios voluntarios de la ANC y del Comité de Defensa de la República de Vic repartieron farolillos con lazos amarillos, según informa Efe.
En 2017, la cabalgata de Vic, municipio elegido por TV3 para su retransmisión anual, fue polémica por la iniciativa de las entidades independentistas que pidieron acudir a la celebración con farolillos con la estelada. Este año también hubo farolillos, pero de color amarillo: los 'farolillos por la libertad', cuya función es la de aportar dinero a la 'caja de solidaridad' para pagar las fianzas de los líderes políticos encarcelados en caso de que así se requiera.
En San Lorenzo de Morunys (Lérida), los protagonistas no fueron ni los niños ni los reyes, sino su alcalde, Francesc Xavier Mas Pintó. Durante la cabalgata, decorada con símbolos amarillos, el regidor independentista politizó su discurso: