El misterio del móvil del montañero Jon Bárcena genera dudas en el caso
El cuerpo del joven apareció sin signos de violencia; la consejera vasca de Seguridad, Beltrán de Heredia, no despeja las incógnitas en torno al terminal.
1 febrero, 2018 02:42Noticias relacionadas
La autopsia confirma que el cuerpo de Jon Bárcena, el joven de 19 años de Berriz desaparecido en el monte Gorbea (Álava) hace un mes, no presenta signos de violencia. A lo largo del caso ha habido varios avances significativos, desde el testimonio de los testigos hasta el hallazgo de las pertenencias del montañero. Pero hay un elemento clave del que todavía no ha trascendido ninguna información: su teléfono móvil, fundamental en las pesquisas llevadas a cabo por la Ertzaintza y sobre el que ahora giran algunas preguntas sin respuesta.
Jon Bárcena desapareció el pasado 30 de diciembre cuando subía al monte Gorbea acompañado de un grupo de amigos. En un momento dado, se sintió indispuesto y pidió a sus compañeros que siguieran sin él. No le volverían a ver.
El testimonio de un testigo apunta a que el joven Jon podría haber llegado hasta las inmediaciones del pantano de Urrunaga, donde efectivos de la Ertzaintza y un grupo de voluntarios iniciaron una gran batida. A principios de enero localizaron los efectos personales del montañero en una chabola en una zona boscosa.
El pasado 28 de diciembre, se halló el cuerpo del chico no muy lejos de la cabaña. El cadáver se encontraba fuera del agua. Un familiar confirmó su identidad.
En todo este proceso, hay un elemento clave: el teléfono móvil de Jon Bárcena. El pasado 10 de enero, la consejera vasca de Seguridad Estefanía Beltrán de Heredia eludió responder a las preguntas de los periodistas sobre el supuesto hallazgo del terminal en la cabaña en la que estaban las pertenencias: argumentó que se trataba de un elemento fundamental en las pesquisas. Todo hacía pensar que se estaba rastreando su señal captada por las antenas de repetición para intentar dar con su paradero.
Ahora, con el hallazgo del cuerpo y descartando la hipótesis del crimen, Beltrán de Heredia tampoco resuelve las dudas en torno al teléfono móvil. En una entrevista emitida este miércoles en Radio Euskadi, la consejera ha señalado que no le consta que se haya encontrado el terminal: "En cualquier caso, corresponde a la investigación judicial".
Fuentes policiales consultadas por EL ESPAÑOL han insistido igualmente en que no se puede facilitar ningún dato relacionado con el teléfono de Bárcena.
Sin signos de violencia
La autopsia practicada al cadáver de Jon Bárcena revela que no hay indicios de criminalidad en la muerte del joven montañero de Berriz, cuyo cuerpo fue localizado este pasado domingo junto al pantano de Urrunaga, en Legutiano (Álava), por lo que el joven habría muerto por causas naturales, según han informado fuentes de la investigación a Europa Press.
El cuerpo fue identificado este mismo domingo por uno de los familiares del joven y no presentaba signos de violencia. La localización tuvo lugar en un paraje de bosque cerrado, de difícil acceso, situado en la zona de la Chopera, en el término municipal de Legutiano, que había sido rastreado tanto por las Ertzaintza como por voluntarios y familiares.
Desde el primer momento se estableció la hipótesis principal de que el cadáver correspondía al joven desaparecido, vecino de Berriz de 19 años de edad, a quien los equipos de rescate buscaban desde el pasado 30 de diciembre, fecha de su desaparición en el monte Gorbea. La hipótesis se vio consolidada por la identificación realizada sobre el terreno por uno de los familiares de Jon, participante en la búsqueda.