El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha asegurado este sábado que la cámara vive una situación anómala y que continuará defendiendo los derechos de los 135 diputados y de las personas que les han votado: "Nunca dejaré de denunciar la situación de los diputados presos y exiliados hasta que estén en casa".
En un mensaje en su cuenta de Facebook, Torrent ha recordado que la libertad de expresión debe ser válida para "todo el mundo", después de que su discurso este viernes en el Colegio de Abogados de Barcelona (Icab) provocara la protesta de varios asistentes, incluido el presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, y el fiscal jefe de Cataluña, Francisco Bañeres, y la fiscal jefe de Barcelona, Concepción Talón, que abandonaron el acto.
"Libertad de expresión"
"La libertad de expresión debe ser válida para todo el mundo. Y eso incluye, evidentemente, aquellos que quieran expresar su desacuerdo con mis palabras abandonando el acto", aunque considera básico el respeto institucional, ya que, según él, la libertad de expresión se defiende cuando se ven y oyen cosas que no gustan.
Torrent ha argumentado hoy en su Facebook que preside un Parlament "que vive una situación anómala: con diputados en prisión y en el exilio, que se ven privados de sus derechos políticos, y, en consecuencia, los de los centenares de miles de personas que les han votado".
Ha considerado, pues, su "obligación" de velar por sus derechos porque, si no lo hiciera, "si normalizara esta anomalía, no estaría cumpliendo con las funciones de mi cargo", opina.
Asimismo, ha reafirmado que el sistema judicial catalán y español está lleno de buenos profesionales que creen en la Justicia, la democracia y el Estado de derecho, y, precisamente por ello, ha pedido a los profesionales del mundo jurídico que asuman "la gravedad del momento" que se está viviendo.
Torrent también ha agradecido a los abogados su trabajo, y les ha animado a seguir defendiendo con "firmeza, rigor y determinación" los derechos y libertades.