Durante su comparecencia en la Asamblea de Madrid, Cristina Cifuentes ha mostrado varios documentos para tratar de demostrar que su máster es "perfectamente real y legal", según defiende. Sin embargo, la presidenta madrileña ha tenido un ligero lapsus cuando ha enseñado una hoja en la que se recogían las calificaciones de todas las asignaturas cursadas. "Obtuve una nota media final de 7,43 por ciento", ha dicho de forma errónea, ya que las calificaciones académicas no se reflejan en porcentajes, sino en una escala del 1 al 10. También las notas medias.
Cifuentes ha aportado documentación para aclarar que hay constancia documental de la matrícula del máster, de las asignaturas matriculadas y del pago del curso. No obstante, las informaciones publicadas en los últimos días, como que se matriculó tres meses después de que finalizase el plazo, han colocado a la presidenta de la Comunidad de Madrid en una encrucijada.
Otro de los puntos oscuros del máster que supuestamente realizó Cifuentes en 2012 es dónde está el TFM. El acta que presentó la líder del PP madrileño hace unos días no llevaba ni el sello ni el registro oficial de la Universidad Rey Juan Carlos. Además, este lunes El Confidencial ha publicado que dos de las tres firmas que avalan el acta habrían sido falsificadas.
"Ni mi currículum ni mis calificaciones han sido falseadas ni falsificadas", ha enfatizado Cifuentes. Esta operación es, a su juicio, un "intento de desestabilización institucional", aunque advirtió a sus rivales políticos que "no lo conseguirán".