La Generalitat financió durante años delegaciones, las llamadas embajadas, en un buen número de países que, entre otras cosas, daban a conocer el ideario independentista. La Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural presumen de tener una estructura en prácticamente cada ciudad media, nutrida por voluntarios. En las redes sociales se pueden encontrar cientos de cuentas de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) en todo el continente que, junto a los anteriores, se movilizan para saturar las encuestas que periódicos de toda Europa ofrecen a sus usuarios en internet.
Así, poco a poco, el independentismo ha ido construyendo un relato que ha calado en algunos sectores sociales fuera de España al mismo tiempo que lo hacía en Cataluña. Altos cargos del Gobierno, del PSOE y de Ciudadanos reconocen a menudo que al Estado le ha faltado presentar una estrategia comunicativa y diplomática global y amplia para dar a conocer las razones para que España siga siendo un país unido. "Hay periodistas en Bruselas que dudan de que España sea una democracia y repiten sin dudar los argumentos de los independentistas", explicaba hace días una apesadumbrada fuente del Ejecutivo.
La detención y posterior excarcelación de Carles Puigdemont en Alemania, un revés en toda regla para el Tribunal Supremo y los partidos constitucionalistas, que confiaban en su entrega a España, ha llevado a Ciudadanos y a la organización Societat Civil Catalana a mover ficha.
Intensa agenda de Arrimadas
La líder del partido naranja, Inés Arrimadas, viajará este miércoles a Bruselas. Allí desplegará una intensa agenda que incluirá numerosas reuniones con altos cargos de los liberales en la Eurocámara, a los que Arrimadas quiere trasladar su visión sobre la profunda crisis en Cataluña. Entre las reuniones previstas están las de Hans Van Baalen, presidente de la Alianza de Liberales Europeos (ALDE), el presidente del grupo liberal en la cámara europea, Guy Verhofstadt, ex primer ministro belga, y la vicepresidenta, la holandesa Sophie In't Veld.
Además, Arrimadas se verá con Pablo García-Berdoy, embajador de España ante la UE, trabajadores europeos en las instituciones y afiliados y simpatizantes de Ciudadanos que residen en la capital comunitaria.
SCC a Berlín
Por su parte, Societat Civil Catalana, la asociación que ha organizado las manifestaciones más multitudinarias en Barcelona a favor de la unidad de España y la reconciliación de los catalanes, prepara un viaje a Berlín, donde se encuentra el expresident Puigdemont tras su excarcelación.
El presidente de SCC, José Rosiñol, y la vicepresidenta, Miriam Tey, viajarán a un país donde es más "visible que en otros países que la información que se da está muy sesgada, porque es fundamentalmente la versión de la realidad catalana que ofrecen los nacionalistas", según ha explicado Tey a Europa Press.
En SCC lamentan que la sociedad alemana haya sido particularmente permeable a la autodeterminación de Cataluña a pesar de que no cuente con el respaldo de la mayoría de la población catalana y contravenga las leyes. En Alemania, Puigdemont ha recibido el apoyo de varios diputados, aunque ninguno de los partidos más importantes sino más bien de los extremos del arco parlamentario.
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