A Ramón Rull lo conocían en Siria con el sobrenombre de Kandal. Había viajado hasta el país en guerra para unirse a las milicias kurdas que combaten contra el Estado Islámico. Valenciano de 55 años, ha perdido la vida al explotar una bomba trampa que le alcanzó de pleno. Se trata del segundo español muerto en territorio sirio tras el fallecimiento del joven Samuel Prada.
Ramón Rull, de orígenes valencianos pero asentado en Madrid, tenía 55 años. En las últimas Navidades había conocido a algunos de los españoles que han luchado contra el Estado Islámico en territorios iraquí y sirio, en movimientos siempre desvinculados del Ejército español.
De hecho, Ramón Rull, al igual que otros españoles, estaba integrado en las milicias kurdas de la YBS (Unidades de Resistencia de Sinjar). Samuel Prada, quien perdió la vida a los 24 años bajo bombardeos turcos el pasado 10 de febrero en la región siria de Afrin, combatía en la misma unidad.
"No tenía últimamente ninguna profesión", señala un conocido de Ramón Rull en conversación con EL ESPAÑOL. Según apunta esta fuente, el fallecido no tenía apenas formación militar: adquirió todos sus conocimientos en un adiestramiento que cumplió en Siria, país al que llegó en febrero de este año.
La noticia de su muerte se conoció a través de la Asociación Apoyo Voluntarios Españoles contra el Daesh: "Se ha encontrado con la muerte de manera instantánea, sin sufrir [...] ya que falleció en el acto".
La repatriación
Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores apuntan a EL ESPAÑOL que trabajan en la confirmación de la noticia. Una vez se consiga, los esfuerzos se centrarán en la mediación para su repatriación. Estas mismas fuentes insisten en los riesgos que entraña viajar a estos países en conflicto y desaconsejan cualquier traslado salvo motivos de imperiosa necesidad: "Todo el país se considera zona de riesgo, desaconsejándose todo viaje al mismo. Se recomienda que los españoles que residen en Siria abandonen el país".
Los movimientos de estos combatientes contra el Estado Islámico no tienen ninguna vinculación con el despliegue del Ejército español en Irak, integrado en la Coalición Internacional contra el Daesh: las Fuerzas Armadas forman parte de una misión de asesoramiento y adiestramiento de las tropas locales.