La sentencia del caso Gürtel le ha estallado en la cara a Rajoy en forma de moción de censura horas después de que Cs y PNV le garantizasen que podía agotar la legislatura. La constatación judicial de que el PP tenía una contabilidad B nutrida de fondos de la corrupción ha sido aprovechada por Pedro Sánchez para lanzarse a la piscina descartando de antemano cualquier posibilidad de acuerdo previo con Albert Rivera.
El líder socialista quiere gobernar, no renuncia al apoyo de Podemos y los separatistas para ser investido, y ya ha dicho que quiere gobernar antes de convocar elecciones, como ha pedido Rivera. Este menú cerrado es inaceptable para la dirección de Cs, donde el temor a que “el indulto de los presos y el levantamiento del 155 sean el precio de la moción” tomó consistencia a medida que nacionalistas y minoritarios fijaban posición.
Podemos (67 diputados) y ERC (9) han dado ya un sí incondicional a Sánchez; el PDeCAT (8) “valorará” la moción pese a la negativa de JpCat de pactar nada con un “defensor del 155”; Bildu (2) está loco por la música; y todos los ojos miran al PNV (5) que, según comentario apócrifo, “después del cuponazo de Rajoy podría buscar la pedrea de Sánchez”.
Por mucho que Pedro Sánchez haya prometido encabezar un Gobierno constitucionalista y defender la “unidad territorial”, la comparsa potencial del PSOE ha puesto en alerta a Cs. Un miembro de la cúpula de Cs ironizaba en privado sobre la lealtad de Podemos y ERC con la Constitución y la unidad territorial, y daba por hecho que lo que ambas formaciones le pedirán será “que levante el 155 e indulte a los presos”.
Fue Miquel Iceta quien durante la campaña de las elecciones catalanas dijo que pediría el indulto a los presos si se convertía en presidente. Ferraz le reconvino y el candidato del PSC se desdijo a las horas -ha sido “prematuro”, dijo-, pero en Cs han por sentado que el asunto volverá estar sobre la mesa: “Parece que lo descartó, pero no se encontraba ante esta situación. Pedro Sánchez si puede equivocarse, lo hará”, comentaba a EL ESPAÑOL otro destacado diputado.
"La presión de Iceta"
Su tesis parte de que “aunque no lo dirá abiertamente”, la liberación de los presos está en la agenda del PDeCAT, “y Pedro Sánchez caerá ante la presión de Iceta que querrá ir de que va a cerrar las heridas de Cataluña”.
En privado, los dirigentes de Cs admiten que Pedro Sánchez tenía “pocas opciones” después de que Podemos lanzara la idea de la moción de censura, pero consideran que ha sido “torpe” al descartar de antemano una negociación con Cs para convocar elecciones cuanto antes. “Le tiene miedo a las urnas”, resumen. El PSOE no está fuerte en las encuestas y quiere tiempo para cecer antes de sacar las urnas.