Un grupo de exaltados separatistas ha acosado esta mañana a la plana mayor de Ciudadanos en la localidad barcelonesa de Vic. Inés Arrimadas, Carlos Carrizosa (portavoz en el Parlament), José María Espejo (vicepresidente segundo de la Mesa del Parlament) y otros dirigentes delpartido que ganó las elecciones el 21-D se habían congregado en Vic para hacer constar la voz de esa mayoría de catalanes no independentistas que, a tenor de los pronunciamientos y actuaciones de Quim Torra, no merecen ser tenidos en cuenta por parte del nuevo Govern. Una pequeña muchedumbre de radicales les rodeó, gritó, pitó y abucheó.
El acoso de los independentistas se produce días después de que el Consistorio negara el permiso preceptivo a Cs para celebrar allí un acto de partido. También pocos días después de que las juventudes de la CUP la emprendieran a insultos y empellones contra miembros de la plataforma Societat Civil Catalana en un homenaje a Cervantes en la Universidad de Barcelona.
La presencia de Arrimadas en este bastión separatista de Barcelona se produce tres días después de que el Ayuntamiento de la ciudad -gobernado por CDC con apoyo del PSC- denegase a Cs permiso para celebrar un acto de partido -un acto "constitucionalista", matizan en el partido naranja- en la Plaza de la Catedral.
La portavoz nacional de Cs se ha dejado ver en la localidad para dar un canutazo a la prensa y dejar constancia de que el partido ganador de las elecciones del 21-D no va a permitir la marginación ni exclusión de los catalanes no nacionalistas. "No nos van a callar", enfatizó Arrimadas tras emplazar al Gobierno socialista de Pedro Sánchez a "defender y proteger" los derechos de todos los catalanes.
El mensaje de Arrimadas cobra un valor singular como contestación a la política de "puentes tendidos" con el independentismo de Pedro Sánchez y la ministra de Administraciones Territoriales, Meritxell Batet. No en balde, este acto de Cs en Vic se produce horas después de que el primer Consejo de Ministros socialista anunciara que levanta el control de las cuentas de la Generalitat como "gesto a Cataluña". Este sábado, la ministra Batet ha defendido que "la reforma de la Constitución es urgente, viable y deseable" en un acto en defensa del federalismo.
A Batet ha contestado a través de Twitter el líder de Cs, Albert Rivera, recordando las reformas constitucionales que han impedido PP y PSOE y advirtiendo de que la Carta Magna no debe modificarse para darle cobertura a un concepto discutido y discutible como es la "nación de naciones".
La visita de Arrimadas a Vic ha movilizado a la contra a los separatistas, como reflejan los vídeos que colgaron en las redes los diputados de Cs. Carlos Carrizosa llamó la atención sobre lo insólito que es que "el primer partido de Cataluña no puede celebrar un acto ni asistir a Vic sin que los intolerantes nos increpen, insulten y amenacen".
También colgó un vídeo sobre el acoso de los intolerantes el vicepresidente segundo del Parlament, José María Espejo.