Jorge Rodríguez ha dimitido como presidente de la Diputación de Valencia tras ser acusado de malversación y prevaricación. "Dimito con la conciencia tranquila y seguro de mi inocencia", ha dicho. "Podemos habernos equivocado o metido la pata pero nunca la mano".
Tras haber sido detenido la semana pasada en el marco de la Operación Alquería que investiga irregularidades en la contratación de personal directivo de Divalterra, empresa pública dependiente de la corporación provincial, Rodríguez ha anunciado su renuncia en rueda de prensa.
"Hace tres años asumí la presidencia de la Diputación desde la convicción de poder mejorar la vida de los ciudadanos. Empezamos a trabajar con un equipo plural para acabar con la arbitrariedad y que la Diputación dejara de dar vergüenza", detalló. "Encontramos una diputación trufada de casos de corrupción, nos hemos puesto a trabajar para estar al servicio de todos, con criterios justos y hasta el miércoles de la semana pasada creo que lo conseguimos", señaló.
Recalcando siempre su inocencia, Rodríguez ha presentado "la dimisión desde la lealtad a las instituciones y a la ciudadanía y para demostrarla es mejor estar fuera de la institución". "Puede que hayamos puesto el listón de la ética muy alta, pero ha de ser así", comentó.
Sobre la remodelación del equipo de Divalterra, la antigüa Imelsa, ha dicho que decidieron "lo mejor para controlar la empresa". "De los 15 miembros 13 decidimos nombrar a un gerente nuevo que contara con la confianza del Gobierno".